Falta poco para que se cumpla el primer año desde que el Ingreso Mínimo Vital (IMV) comenzó su andadura. La prestación estrella de la Seguridad Social ha tenido un camino complicado en todos los aspectos y a día de hoy, aun no alcanza los objetivos marcados.
Recientemente el gobierno ha hecho públicos los datos mas relevantes hasta abril de esta prestación, los cuales compartimos y valoramos:
1,32 millones de solicitudes
Hasta mediados de mayo, el INSS ha recibido 1,32 millones de solicitudes válidas desde que se puso en marcha la prestación. De ellas, casi 1,1 millones, más del 81% del total, se han tramitado, con 276.000 prestaciones aprobadas y 700.000 denegadas. Otras 65.000 están en proceso de subsanación, es decir, que se ha solicitado al solicitante o a alguna administración alguna información para completar el expediente.
En cuanto a las solicitudes denegadas, en su mayoría se han producido por no cumplir el criterio de vulnerabilidad (al superar los umbrales de renta y patrimonio), aunque un 10% de las denegaciones se deben a la falta de acreditación de la unidad de convivencia.
Para solucionar este punto, en enero se realizó una modificación normativa para que los trabajadores sociales y entidades colaboradoras del IMV puedan realizar la acreditación y facilitar el reconocimiento de situaciones de convivencia no convencionales.
En esta nómina se incluyen por primera vez beneficiarios del País Vasco que han sido reconocidos sin necesidad de presentar solicitud a través de la pasarela de reconocimiento en bloque que el INSS ha puesto a disposición de las comunidades autónomas.
En los meses anteriores esta pasarela, que está a disposición de todas las autonomías, ya fue utilizada por Aragón y Navarra.
Las cifras actuales
El Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) abonará próximamente 260.206 prestaciones a hogares en los que viven 682.808 personas.
Del total de los hogares beneficiarios, el 61% del total más de 160.000 cuentan con menores. Entre ellos, la nómina de mayo se abonará a 73.301 hogares monoparentales (el 28% del total) y a 87.403 hogares no monoparentales con menores (el 33% del total), lo que indica la incidencia que está teniendo esta prestación en la reducción de la pobreza infantil.
La prestación media reconocida asciende a 448 euros al mes. El IMV garantiza un nivel de renta mínimo, que varía en función del tipo de hogar contabilizando los ingresos existentes. Ya que el umbral de renta garantizada oscila entre los 470 euros al mes (el equivalente a una pensión no contributiva) para un hogar unipersonal y los 1.033 euros al mes para unidades de convivencia formadas por dos adultos y tres o más menores o tres adultos y dos o más menores o por cuatro adultos y un menor.
Reducir la pobreza infantil era uno de los grandes objetivos de la puesta en marcha de la prestación
En mayo, casi el 44% de las personas que viven en hogares titulares de la prestación son menores y más del 60% de las unidades de convivencia a las que se les abonará la nómina de mayo tienen al menos a un menor en ellas. Casi uno de cada tres hogares es monoparental.
Por edades, de media, los titulares del IMV tienen 44,32 años. El grupo más numeroso son las personas entre los 36 y los 45 años, que superan el 34% del total.
Por género, más del 70% de los titulares de la prestación son mujeres y también son mayoría entre los beneficiarios, con 316.163 mujeres que forman parte de las unidades de convivencia que reciben el IMV.
Cifras por debajo de los objetivos marcados
Esta prestación, que cuenta con una dotación anual de unos 3.000 millones de euros, está pensada para llegar a unos 850.000 hogares, pero hasta ahora solo se han aprobado cerca de 276.000 prestaciones, denegándose aproximadamente unas 700.000 solicitudes, lo que suponen 7 de cada de 10 expedientes.
Además, los tiempos de espera siguen eternizándose, y nos encontramos con muchos casos que siguen esperando que se les resuelva la solicitud desde hace más de 10 meses.
Por otro lado, la cobertura para la lucha contra la pobreza infantil no está llegando a las cifras necesarias. Y es que, aun habiendo muchos hogares con menores que solicitan la ayuda, los umbrales de renta y patrimonio tan bajos establecidos, no permiten que muchas familias con carencias económicas accedan a la prestación.
Otra cuestión es la del plan de inclusión laboral que el percibir el IMV lleva consigo y es que, a día de hoy, no se ha implementado. Si que existen ciertas previsiones, pero los perceptores tanto desde 2020 como 2021, no se encuentran dentro de ningún plan laboral.
Los planes de mejora previstos
Desde el Plan de choque para la economía de los cuidados y refuerzo de las políticas de inclusión, se tomarán medidas para aumentar el acceso a la prestación, y su cuantía para las familias con hijos en riesgo de exclusión. Para ello, se incrementará el acceso al IMV para las familias con hijos alzando los umbrales máximos de renta que permiten percibirlo. Esto tendrá, como consecuencia, que se eleven las cantidades que reciban los ya beneficiarios del IMV.
Sin embargo, todavía no hay cifras para el incremento y mejora de los umbrales de renta garantizada.
Fuentes del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones explican que la medida está en estudio y se están haciendo simulaciones con todos los umbrales de renta para plantear y ejecutar dichas mejoras.
En cuanto a los planes de inclusión laboral, lo que plantea el Gobierno en el Plan de Recuperación es la puesta en marcha de varios proyectos piloto en 2022 y 2023 para los cuales se han destinado 298 millones de euros.
Para el año próximo año, se prevé la firma de ocho convenios bilaterales de colaboración con agentes relevantes para la inclusión social, entre los que se incluirán administraciones públicas subnacionales y/o el Tercer Sector de Acción Social. Para dentro de dos años, se firmarán diez convenios de este tipo.
Ritmo lento y mucho por hacer
Podríamos decir que el IMV, avanza, pero a un ritmo lento. Y es que, a falta de pocos días para que se cumpla un año de su lanzamiento, no se han alcanzado ni la mitad de los objetivos marcados.
Todavía tenemos un numero importante de expedientes que acumulan meses de atraso en lo referente a su resolución. La gestión ha sido muy deficiente, y ha creado una sensación de incertidumbre y desesperanza entre los solicitantes que dista mucho de la intención de aliviar la situación de crisis en la que se encuentran.
Además, la modificación de los umbrales y las cuantías resulta primordial, ya que muchas familias en situación de necesidad se están quedando fuera por no cumplir con este requisito. Además, muchas de las que lo perciben, no pueden subsistir con la cantidad aprobada. Ya que aunque la cuantía media que ha indicado el gobierno en su ultimo informe es de 448 euros al mes, son miles de familias las que perciben entre 11 y 100 euros al mes.
Es cierto que se han ido subsanando ciertos errores, pero aun quedan muchos más por solucionar. Podemos ver cómo el IMV está comenzando a tomar camino, aunque aun le queda mucho por modificar y recorrer.