Ahora que llega el buen tiempo, seguro que muchos de vosotros estáis pensando en iros a la costa o las islas para tumbaros al sol en algunas de sus playas.
Ni Nostromo ni yo somos mucho de playa, pero recordamos con cariño un viaje por la costa de la Comunitat Valenciana que hicimos en el 2010. Estuvimos alojados cerca de Valencia y desde ahí recorríamos todos los días una zona de la costa distinta.
En Castellón descubrimos una playa que nos gustó mucho porque tenía muchas palmeras y era la primera vez que me bañaba en el Mediterráneo y descubrí con alegría que el agua está caliente!! Si os habéis bañado en el Atlántico, que es lo que llevo haciendo yo desde pequeña, sabréis que el agua está helada. Hay veces que hasta te duelen los pies al entrar en el mar de lo fría que está el agua. La verdad es que me costaba creer que estuviera a esa temperatura, era como bañarse en la bañera de tu casa!!
La ciudad es pequeñita pero tiene mucho encanto, aquí podéis ver la entrada que publiqué en su día.
Ese día estuvo cargado de emociones, ya que de camino a Valencia vimos una señal anunciando las Cuevas de San José de Vall d´Uixó. Aparte de la aracnofobia, hay dos cosas más que no me gustan nada, una son los sitios con techos bajos y el saber que no hago pie en el agua. En estas cuevas, se juntaron estos dos últimos miedos.
De todas formas, es una experiencia estupenda y teniendo en cuenta que el post que escribí sobre ellas es una de las 10 entradas más vistas de Deambulando, creo que hay mucha gente que opina lo mismo.
Aunque, como os decía más arriba, no somos mucho de playa, estamos deseando volver por esa zona. El bañarse en el Mediterráneo no tiene precio y suele haber buenas ofertas de hoteles en la zona, así que habrá que mirar de vez en cuando.