Castigo divino: La Peste negra

Yo nunca he entendido qué celebra el Halloween. Sé que está vinculado con fiestas de los antiguos celtas, y que es ocasión para sacar disfraces de monstruos y contar historias de terror, pero nunca he sabido precisamente qué festeja. De cualquier forma, y con ánimos de tratar algo referente a la muerte, hoy escribo sobre uno de los episodios más siniestros de la humanidad, ocurrido en una época donde reinaba la superstición y la ignorancia, lo que llevó a la muerte a millones de personas en Europa, África y Asia en el siglo XIV: la peste negra.

Hasta hoy se desconoce realmente qué enfermedad fue la que ocasionó tantas muertes, quizá peste bubónica, que es la teoría más aceptada. Esta enfermedad es transmitida por la bacteria Yersinia pestis, y se contagia por las pulgas que habitan en las ratas; y dado que los europeos en la Edad Media, eran poco higiénicos, los desechos se tiraban a las calles y las ratas deambulaban por donde sea; y como en la antigûedad, las enfermedades eran cosas de demonios o castigo divino. Esta enfermedad de algún modo era conocida, en el sentido de que en ocasiones anteriores ya se había manifestado, pero no con la misma intensidad como lo haría en el siglo XIV.
Esta pandemia, se cree que inició en Asia Central, llevada al este de Europa por los mongoles y transmitida al resto de Europa por los comerciantes entre 1347 y 1348, llegando primero a las ciudades italianas , y de ahí al resto de Europa: al centro de Europa a fines de 1347; a España, Francia e Inglaterra en 1348; a Alemania y Polonia en 1350; y Escandinavia en 1351. La reacción y pánico popular, no se hicieron esperar, pues diversas interpretaciones, menos la falta de cuidados higiénicos, se atribuyeron al origen de la peste negra: no solo como castigo divino, sino castigo ¿porqué? ¿La tolerancia de ciertas personas hacia los judíos, a las prostitutas o haber perdido Tierra Santa de manos de los musulmanes, el Cisma de Oriente? ¿Porqué...?

Los europeos dentro de la locura que les infundía el pánico, de la creciente cantidad de muertos y la forma en que estos morían, recurrían a perseguir a los judíos (que obviamente nada tenían que ver), a exiliar a las prostitutas y otros "pecadores", y otros más a unirse a la comunidad de los flagelantes, que rezaban y se torturaban como expiación de sus culpas, con el objetivo de acabar con la terrible plaga. A fin de cuentas pecadores o no, la peste negra se llevó al otro mundo a 25 millones de personas, solo en Europa, dejando muchas regiones despobladas.

Sin embargo, para algunos historiadores, la peste negra fue causada, además de la falta de higiene, por la baja producción agrícola, que provocaba la escasez de alimentos y de ahí desnutrición entre las personas. Como consecuencia, las bajas defensas de la población permitieron la enorme mortandad. Aún así, hay quienes opinan que la peste negra fue una más permitió que se diera el Renacimiento, que el feudalismo cayera, y desde luego, que la Edad Media terminara. Muchos años pasarían entre el último brote de la peste, y que se conocieran medidas para prevenir enfermedades, como esta y muchas otras.
En esta era nos encontramos frente a dos pandemias: la influenza AH1N1 y el SIDA. "Si a uno, el saco le queda", señalar a cualquiera de estos dos males como castigo divino, de cualquier forma, el único pecado sería no prevenir estas o cualquier otra enfermedad a tiempo.