Catacumbas romanas
En Roma hay varias catacumbas abiertas al público, las mismas atraen mucha gente pues tienen un aire de misterio. Las catacumbas de San Calixto son un emprendimiento privado. Se paga una entrada y hay recorridos guiados para los distintos idiomas. Básicamente es un cementerio subterráneo constituido por numerosas galerías en distintos niveles, algunos de los cuales están abiertos al público.
Luego de una breve explicación histórica, se insiste que las fotos sólo pueden ser tomadas en el exterior y no dentro de las galerías.Al ingresar uno va bajando las estrechas y numerosas galerías que se bifurcan de una manera caótica, por lo que es bueno no separarse del grupo. Si uno es claustrofóbico no es una visita recomendable. En realidad al poco rato ya la mayoría tenía cara de querer salir, pero hay un circuito que seguir y no puede acortarse.Hay buena ventilación, y es bueno llevar un abrigo liviano, pues abajo disminuye la temperatura.
En las galerías están numerosos nichos donde se depositaban los cuerpos. También hay pequeñas capillas de personas más pudientes de la época.Aprendía algo nuevo, siempre había escuchado que en las catacumbas vivieron escondidos los cristianos. El guía nos dijo que no fue así. Fueron los primeros lugares de culto- los cristianos iban a sus ceremonias litúrgicas a las catacumbas donde estaban sus mártires o personas destacadas en la fe. Allí el féretro hacía de altar. Esta explicación fue lo más interesante de la visita.En la entrada hay todo tipo de máquinas expendedoras de bebidas y minutas. También hay una tienda muy bien surtida con recuerdos.