"Cataratas del Iguazú III"

Desde la playa de la Isla San Martín que les mostramos en la entrada anterior iniciamos la aventura del paseo en gomón, con personas hablando en distintos idiomas, con un fin en común, disfrutar la naturaleza (una vez que los enamorados de la foto se nos unieron, vamos Paula aquí todos se animan...
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Una vez que estamos todos acomodados en nuestro asiento y con nuestro chaleco salvavidas partimos a la aventura, con los motores rugiendo fuimos derechito al gran salto....
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Y lo encaramos por un lado, por el otro, hasta quedar totalmente empapados por el agua, refrescando cada célula de nuestro excitado cuerpo, por la adrenalina...
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Cuando volvimos a tocar tierra firme, seguimos asombrándonos ante la riqueza del bosque tropical...
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... que nos regala bellezas como esta planta que los botánicos la llaman “Sinningia sellowii” y nos muestra sus flores acampanadas y coloridas, le encanta la luz solar directa y puede alcanzar unos 60 cm de altura ¿vieron cómo extiende sus largos tallos para florecer?...
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...en esta región también abundan las cañas-tacuaras, similares al bambú, son finitas y ornamentales y capaces de crecer unos 3 metros …. pero mucho más imponentes son las gigantescas cañas “Tacuaruzú” que logran alcanzar los 10 metros de altura...
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...Como dice Facundo Cabral en su canción: “No estás deprimido, estás distraído, distraído de la vida que te rodea delfines, bosques, mares, montañas, ríos”, si estamos atentos podemos ver entre la telarañas que forman los árboles, arbustos y lianas, aves como este loro multicolor...
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...o este tucán charlatán que nos dirigió la palabra, uno más de las tantas aves que habitan las reservas del lado brasileño y del lado argentino dedicadas a proteger la biodiversidad del lugar...
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A unos 10 km de Puerto Iguazú se encuentra Güirá Oga (“el hogar de los pájaros”) donde diversas aves y animales como este yacaré reciben la ayuda del hombre para su rehabilitación...otro lugar al cual tenes que ir.
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...y así nos vamos despidiendo de este magnífico lugar, que nos recibió con las manos abiertas, ya con su estación desierta, con deseos de no querernos ir, es como si el lugar te atrapara con sus lianas y no te soltara, pero tenemos que seguir nuestro viaje....Viajero de la cibernética, deja tus huellas en el lugar: