
No, Britney, no empieces a cantar, que hoy estamos hablando de tu hermana y hoy no eres la protagonista:

Liándose la manta a la cabeza, Jamie dejó su lado más dulce para dedicarse a ser un calco de su hermana, y claro, el día de su boda no iba a calzarse unos elegantes tacones o unas bonitas sandalias, no y no, estamos hablando de una Spears, así que no podía ser de otra forma y se presentó con este par de UGGs sucias dónde las haya...

Ay, esta gente teniendo el mundo a sus pies y pudiendo elegir cualquier par cómodo de zapatos o manoletinas, definitivamente el dinero no compra el estilo:






