La base de la cocaína, también llamada como PACO erróneamente llamada "pasta base" se ve en nuestro medio asociado a la última crisis socio-económica que sufrió el país y en apariencia vino para quedarse.
Es una droga que afecta a los segmentos más débiles de la sociedad: niños y jóvenes y entre ellos a los de nivel educativo y económico menos favorecido.
Ingresó al organismo luego de ser fumado en instrumentos creados para dicho objetivo, con el fin de obtener euforia y placer; pero tiene un efecto tan breve como deletéreo para todo el organismo del ser humano, lo que provoca una inmediata dependencia, con el incremento de la frecuencia de su utilización, lleva a las personas a consumir decenas de dosis diarias.
En los minutos que siguen a la absorción, aparecen los efectos sobre el sistema nervioso central, con riesgo de pérdida de conocimiento y convulsiones, luego se afecta el sistema cardiovascular, produciendo alteraciones en el ritmo cardíaco e incremento de la tensión arterial, lo que pone en riesgo la vida de la persona. Si el consumo está asociado a bebidas alcohólicas u otras drogas, el efecto perjudicial aumenta potencialmente.

Con la utilización prolongada, aún en corto tiempo, el deterioro neurológico, se acompaña también de alteraciones pulmonares y cardíacas, pérdida de peso y estado de abandono personal. Existen consecuencias indirectas asociadas como los traumatismos o lesiones por accidentes o riña, en determinadas circunstancias pueden llegar a ser graves.
