Cenicienta, las fabulas son para siempre (un tebeo de espías)

Portada del tomo

Cenicienta, el personaje y la serie, ha demostrado ser una de las más inteligentes jugadas de Fábulas llegando (casi) a superar a la misma.

La joven del zapato de cristal se encuentra aquí con una vieja enemiga, alguien que es prácticamente igual que ella, pero no hay sitio para las dos.

 Decir que la creación de Bill Willingham fue toda una sorpresa no tiene sentido, tampoco hablar de su calidad o habilidad al manejar las tramas y todos los cuentos en los que se inspira. La familia ha ido creciendo y lo que comenzó como una historia unitaria (con su principio y final bien claritos) terminó llevando al lector por sitios que nunca habría imaginado.

Parte de esta magia, quizá es el término más adecuado al hablar de unos cómics en que todos tienen la suya propia, es el haber sabido diversificar y que las series paralelas no fueran un calco de la primera. Así teníamos a Jack corriendo sus aventuras por toda América, en un claro tono de comedia y con bastante mala uva, y por otro lado a la dulce y frágil Cenicienta convertida en toda una super espía que solo respondía a Lobo y que iba de un lado a otro del mundo según hiciera falta.

Así llegamos hasta esta nueva correría bajo el nombre, muy de película de James Bond, de Las fábulas son para siempre y más una tan conocida como ella. Comenzaremos en Rusia, de nuevo muy al estilo del conocido agente británico, con ella corriendo en bikiny mientras cumple una misión y de paso intenta salvar su vida. Pero esa no es la historia y lo que ya nos adelanta la portada, en la que vemos a una mujer caminando por un camino de baldosas amarillas, es que tendrá que enfrentarse con Dorotea con la que tiene mucho pasado a su espalda.

La narración es totalmente adictiva, desvelando poco a poco los detalles que unen a estas dos féminas en lo que es casi una relación de amor y odio que se extiende mucho tiempo atrás. Más parecidas de lo que podría parecer, y relacionadas por la respectiva leyenda con zapatos que tiene cada una (el de cristal y los de plata), pero una siendo el reflejo de la otra tanto en lo bueno como en lo malo.

Seas seguidor o no de la serie Fábulas este es un tomo que merece la pena tener.