Que los periodistas tenemos la fea costumbre de quejarnos muchas veces por vicio es algo que ya debería figurar en todos los manuales sobre Información. Estamos tan obsesionados en mirarnos al ombligo que, a veces, la realidad pasa por delante de nuestras narices sin que seamos capaces de pulsarla tal y como demanda el ejercicio de la profesión.
Una clara evidencia de ello fue el encuentro twittero con José Luis Centella, @1centella, diputado en el Congreso de Izquierda Unida por Sevilla, que se celebró el pasado jueves en el Centro Cívico Hogar San Fernando y al que, si las cuentas no me fallan, sólo asistimos dos periodistas.
No son demasiado frecuentes las ocasiones en las que un diputado se pone a disposición, no sólo de los profesionales de la información, sino de cualquier ciudadano que se sienta interesado por los temas de actualidad política y se muestre receptivo a recibir tanto críticas como propuestas para trasladar al Parlamento de la nación.
Como manifestó Juan Blanco, @juanblan, nos quejamos de falta de transparencia y sólo había que echar un vistazo a la sala para darnos cuenta de cuánto en verdad nos interesa estar al tanto de lo que ocurre entre bambalinas.
Eso sí, después somos unos verdaderos expertos en hacer trending topic de hashtags como #sinpreguntasnocobertura en respuesta a las ruedas de prensa sin preguntas. Contradicciones de una profesión a la que a veces cuesta demasiado trabajo comprender.
De tal forma, no nos hemos enterado que Centella defendió aun con más brío la necesidad urgente de una reforma electoral. Izquierda Unida obtuvo en las pasadas elecciones un incremento de votos bastante superior al del Partido Popular y esta circunstancia no se ha visto reflejada en el número de diputados obtenidos. En palabras del nuevo coordinador del grupo parlamentario de IU en el Congreso de los Diputados, “nosotros estamos en contra de la Ley Electoral cuando nos va mal y también cuando nos va bien”.
Preguntado sobre la polémica creada por la negativa de Gaspar Llamazares, @GLlamazares, a aceptar la portavocía ofrecida por la dirección, Centella quiso quitar hierro al asunto y admitió que tal vez “no se han explicado bien las cosas”, pero que lo que “a la gente le interesa no es el orden que vamos a tener los diputados, sino nuestro trabajo, y en eso nos vamos a volcar”. También manifestó su intención de “trabajar” para que dicha polémica no suponga a la larga la germinación de un cisma interno.
En relación a los otros dos discrepantes al respecto en el seno del grupo, el parlamentario reconoció que en todo ajuste se generan tensiones, pero que en el debate de investidura “se visualizarán las tres fuerzas políticas que integran la coalición”. Admite que este debate al inicio de la legislatura “ha podido crear algo de confusión”, pero que al cabo del tiempo “la gente se va a fijar en nuestro trabajo y esto se olvidará”.
Destacó que ya tienen preparadas más de una treintena de propuestas, algunas desde la perspectiva sevillana, dada su condición de Diputado por Sevilla, que tienen que ver con el Plan Integral del Polígono Sur, el acuerdo sobre Astilleros de cara a la recuperación de su actividad, la red ferroviaria de cercanías y la recuperación de la actividad industrial en la provincia.
Ya en el plano federal, harán un especial énfasis en todo lo referente a la lucha contra el paro y la protección de los parados, el rechazo de los ERE en empresas con beneficios, la suspensión del embargo de vivienda para los parados y la dotación de transporte gratuito. Se comprometió a presentar una proposición no de ley para apoyar la ILP de los sindicatos para derogar la reforma laboral y otra para regular la dación en pago de la vivienda. Además van a pedir la creación de una comisión específica en el Congreso sobre la economía sumergida y el fraude fiscal, de manera que “aquellos que han arruinado a los bancos no se vayan de rositas”.
Cuando le plantearon la posibilidad de establecer el voto vinculante de los no afiliados defendió que “es algo que hay que regularlo y buscar fórmulas para que participe la gente que ha colaborado en el programa”, pero que la figura del militante sigue siendo primordial a la hora de sustentar a las formaciones políticas. Por eso se mostró partidario de las “asambleas abiertas donde se puedan conjugar ambos aspectos”.
Alguien en la sala le planteó la polémica generada con el desbloque de su formación a los presupuestos presentados por el gobierno del Partido Popular en Extremadura. Centella reconoció que aún carecía de datos concretos al respecto y que la decisión correspondía “a los compañeros de Extremadura”, pero que su opinión personal era que “si son unos presupuestos que no corresponden a una salida a la crisis por la izquierda, no deben ser apoyados por Izquierda Unida”.
En relación a la retirada de la flota pesquera española de los caladeros marroquíes ordenada por la UE, afirmó que es el Gobierno español quien debería hacerse cargo de las indemnizaciones, puesto que fue quien “suscribió un acuerdo pesquero ilegal” con el estado alahuí, porque “las aguas del Sáhara no son de Marruecos”. La alternativa, según el portavoz, pasaría por la “búsqueda de nuevos caladeros para que nuestros pescadores puedan pescar con legalidad mediante acuerdos con otros países” y presionar a la UE, para la que la pesca “no es una prioridad”.
Vaticinó, como ya hizo en su día el portavoz de la federación, Cayo Lara, que la legislatura “va a ser más que calentita”, porque los recortes que vienen “van a afectar a mucha gente y bastantes de ellos ya están en las últimas”. De ahí que harán labor de oposición “tanto en el Parlamento como en la calle”.
Hizo una especial mención sobre la estrategia para intentar minimizar los efectos de la reforma constitucional sobre el techo de gasto. Su intención es la de presentar iniciativas de cara a combatirla, ya que para derogarla “haría falta una mayoría que no tenemos”. Así plantearán la fijación de un porcentaje mínimo del presupuesto para gastos sociales tendente a alcanzar la convergencia con la UE. El objetivo sería que el artículo de la constitución que fija el tope de gasto “no se cumpla y que quede al mismo nivel que el derecho a la vivienda”, porque “una fiscalidad alemana no es compatible con unos salarios españoles”.
También abordó el intento de acercamiento a Equo y otras fuerzas minoritarias de la izquierda de cara a las próximas elecciones andaluzas. Lo define como un intento válido de unir fuerzas con “toda la gente que entienda que el cambio no puede venir por el Partido Popular, sino por la izquierda” y declaró que no entendía “el portazo” de Equo en ese sentido, pero que es una estrategia que ya están poniendo en marcha a nivel nacional. “Lo importante en la izquierda en España es que hay que buscar a la gente, olvidándose un poco de las siglas”, manifestó.
José Luis Centella, que reconoció que este tipo de encuentros es una experiencia abierta donde “se hace camino al andar”, se comprometió a mantener la regularidad bimensual de los mismos y a recoger y trasladar a Madrid cuantas propuestas pudieran surgir en su transcurso.
El que los periodistas se muestren interesados en esas respuestas que tanto demandan es ya harina de otro costal.