Cerdeña: Un pequeño continente

Villasimius foto flickr de clurr
Una de las destinaciones más interesantes de Italia es Cerdeña. La isla, por su carácter diferente del resto de la península, representa prácticamente un micro-continente en sí misma. El territorio de Cerdeña es el menos poblado de toda Italia, por lo que viajar hacia estos lares siempre deparará un panorama estupendo donde la naturaleza es dueña y señora.
Cerdeña sigue siendo famosa por su zona norte, conocida como 'Costa Esmeralda', donde los yates millonarios y las villas de lujo de los italianos (y no) transforman este enclave en un destino de gran clase. Durante el verano algunos locales famosos como el 'Millionaire' atraen personajes de la farándula, futbolistas y muchas otras personalidades que desean demostrar su 'buena fortuna' o su 'estilo'; en fin, todo un triunfo de exhibicionismo sin ninguna clase ni sentido.
Aún así la isla esconde muchísimos otros lugares que ameritan una visita. La zona norte-oeste, de clara tradición catalana, expresa con fuerza su raíz en Alghero, una ciudad que una vez fue pueblo de pescadores pero que ahora es conocida como un destino turístico paradisiaco donde el sol y las aguas siempre acogen al paseante.

Capo Buoi foto flickr de clurr
Pero si tomamos la autopista que conduce al sur de la isla podremos encontrarnos con un panorama de montañas y verde que imita sitios de la península ibérica; y es que cuando nos acercamos a la zona sur salen a nuestro encuentro una serie de playas y pueblitos escondidos que sin lugar a dudas merecen enlistarse como algunos de los mejores de toda Italia.
Uno de estos destinos, donde por casualidad me fui de vacaciones en los años ‘90, es Villasimius. A 50 kilómetros de la ciudad de Cagliari, en dirección sur-oeste, este pueblito de pescadores en invierno cuenta solo con pocos miles de habitantes pero en verano adquiere nueva vida de la mano de las personas ansiosas por degustar los encantos de una de las playas más bellas de Italia. Vale aclarar que es un destino más bien para las familias y personas que prefieren la tranquilidad; alojándose en casas o apartamentos. La playa de 'Campulongu' es una de las más espectaculares, con arena blanca y fina, fúndales bajos y aguas cálidas que hospitan a pequeños pececitos que coexisten tranquilamente al lado de los nadadores.
Un poco más al norte se enclava la localidad de Costa Rei, su playa inmensa invita a disfrutar de deportes como el kite-surf.
Pero el sol y el mar no son los únicos atractivos de la zona, en los alrededores hay restaurantes y 'agriturismos' (restaurantes locales de campo donde se sirven las especialidades locales), donde es posible gustar la comida local pródiga en pescado, buen vino tinto que en estas latitudes llaman 'cannonau' y el famoso 'porceddu' o cerdito asado. Para terminar la cena un trago de 'mirto', el licor local, realizado con alcohol y bayas de Cerdeña.
Si deciden dar una vuelta por estos lares la mejor temporada para visitar Villasimius son los meses de Junio o de Septiembre, cuando el calor no es muy fuerte y todavía no hay una gran cantidad de turistas que suelen invadir estas playas en los meses de Julio y Agosto.