Revista Expatriados
Es que había un saltamontes del tamaño de un elefante preñado; me lo encontré de faranduleo entre una de mis macetas con mirada de serial killer y no pude remediar el grito de socorro:-"¡Dios! ¡We have a problem!"-. Por lo visto, le había vuelto a indicar mal las coordenadas, y ahora había mandado a Dios a Fiji.
Y me dije: "esta vez, si Mahoma no va a la montaña, la montaña irá a Mahoma de vacaciones una semana".
Volveré, aunque más morena, pero volveré. Palabra de cookie girl scout ;)