Una de las cosas que más perjudica a una organización es el exceso de burocracia. Papeles que van visitando los diferentes departamentos a velocidad de tortuga, envíos postales que suponen un coste elevado de tiempo y dinero para la empresa, autorizaciones pendientes encima de la mesa del director, que se encuentra de viaje hasta la semana que viene… El uso de certificados digitales permite múltiples ventajas. Sin entrar en detalles, resumo las más conocidas:
- Entidades financieras: con nuestro certificado digital podremos acceder a las denominadas oficinas online, que actúan como una sucursal más de la entidad, permitiendo consultas a cuenta, pagos, solicitud de servicios y, en general, casi todo lo que se puede hacer presencialmente, con la salvedad de que no es necesario desplazarnos ni enviar o recibir documentos en papel.
- Administraciones públicas: envío de la documentación sobre liquidaciones de impuestos por Internet, solicitud de certificados fiscales, tramitación de expedientes, solicitud del documento de vida laboral y muchos más servicios que cada día se van incorporando.
- Comercio electrónico: poder comprar y vender a otras empresas o clientes finales, sin necesidad de firmar un contrato en papel, sino electrónico.
- Extendiendo los límites de las oficinas de la empresa: también los ordenadores pueden intercambiarse certificados digitales. De esta manera, un empleado situado en una ubicación donde no exista una oficina de la empresa, podrá conectarse desde su ordenador personal, siempre que éste se autentique como tal ante otro de la organización, mostrando un certificado digital. Son las llamadas redes privadas virtuales (VPN, del inglés Virtual Private Networks), que utilizan Internet para conectar un PC en cualquier parte del mundo como si se encontrara dentro de las oficinas de la empresa.