Dirigentes del PSOE que dan por perdidas las elecciones del 20N creen que Carme Chacón, ministra de Defensa y autopropuesta como lideresa del Partido, fracasará al exigir que el votante socialista apoye el socialnacionalismo catalán, el del PSC confederalista, en el que España se diluye en nación de naciones.
Chacón también quiere una Generalidad con igual poder que el Estado y superior al de otras CC.AA., con políticos compitiendo internacionalmente con los estatales, y recibiendo favores fiscales como los injustos, aunque constitucionales, del País Vasco y Navarra.
Una Cataluña sin influencia de otros españoles que no sean catalanohablantes, pero gozando de las ventajas mercantiles que proponía el Estatuto Maragall-Zapatero-Montilla, derogado sólo parcialmente por el zapaterista Tribunal Constitucional.
Chacón y otros socialistas catalanes como el expresidente José Montilla propusieron desacatar esa sentencia.
Y ahora piden otro desacato, esta vez al auto del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, que ordena que el castellano sea lengua escolar vehicular, como el catalán.
Irritada, ha declarado que quienes tienen togas y no apoyan la inmersión en catalán son centralistas excluyentes que “braman contra Cataluña y te los encuentras intentando imponer su ideología con sentencias desde los más altos tribunales de Estado”.
Para mayor desconcierto la ha apoyado Rubalcaba al defender la inmersión exclusiva en catalán y despreciar también al Constitucional zapaterista.
Notables socialistas creen que aceptar las imposiciones nacionalistas durante el zapaterato les ha traído el desmoronamiento, y que los socialistas-nacionalistas, los socialnacionalistas, hundirán definitivamente el PSOE.
Para ellos, aunque el líder socialista fuera otro, y con Rubalcaba desacreditado, José Bono sería el mediador deseable en un posible gobierno de salvación nacional dirigido por Mariano Rajoy.
Sufrirá síndrome de abstinencia retirándose de la política, pero como tiene sentido de Estado pasaría a la Historia volviendo bajo palio, como desea.
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SALAS
Pues parece que sí
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Ahora, algo que no es del artista. El cronista no recuerda dónde encontró este anagrama que muestra el oficio real del personaje. Una imagen que habrá que reproducir frecuentemente.