Con la entrada de la década de los '70, el trompetista Chet Baker decide cambiar de aires y se une al antiguo productor de la Impulse Creed Taylor, en esos momentos dirigía el sello discográfico CTI. Para grabar uno de los discos más emblemáticos de la carrera musical de Baker, She was too good to me. En lo musical el disco vuelve a ser otra gran obra maestra de Baker, regresando a los estilos más puros del Jazz, acompañado por Paul Desmond al saxo, Bob James al piano eléctrico, Ron Carter al bajo o John DeJohnette a la batería. Pero al mismo tiempo que empieza a hacer muesca sus adiciones, dejando un poco mermada su voz, perdiendo mucha potencia, cantando en un tono más bajo, pero al mismo tiempo con mucha melancolía. Sobretodo en la canción que da pie al titulo del disco, y aquí es donde me pregunto, ¿quien era demasiado buena para el?.
En el disco aparece una pequeña orquesta de cuerda, acompañando a Baker, dentro de un álbum de 8 canciones conducidas y arregladas por Don Sebesky. Hay quien dijo que en esta época es donde Chet Baker empezaría a caer en picado por culpa de sus adiciones a la droga, el alcohol,y en verdad no irían muy equivocados. Su vida iba girando hacia un agujero negro. Desatándose en un suicidio 14 años después.
Para mi siempre sera el músico que hizo llorar a su trompeta. Este es otro gran álbum a tener en cuenta por los aficionados del buen Jazz. Magnifico.