ZONA NORTE – CHIANG MAI
El viaje de ida lo hicimos desde Madrid hasta Bangkok. Volamos con Finnair e hicimos escala en Helsinki. Nada más llegar a Bangkok, enlazamos con otro a Chiang Mai. No habíamos dormido nada y allí ya eran las 9 de la mañana, con lo que teníamos todo el día por delante. Nos guardamos el cansancio en el bolsillo y comenzamos a caminar.
La estancia iba a ser corta, así que teníamos que aprovechar al máximo las horas de las que disponíamos.
¿Qué hacer en Chiang Mai?
– Visitar la ciudad
– Aventura
- Visitar la ciudad: como en todas las ciudades de Tailandia, tenéis multitud de templos que visitar. Mi recomendación es pasear e ir entrando en los que os vayáis encontrando. También tenéis varios mercadillos que van poniendo en las calles cuando se empieza a poner el sol: de ropa, antigüedades o comida. Como os comentaba en las recomendaciones, no son gran cosa, pero si os acercáis al río quizá tenéis suerte y podéis presenciar un lanzamiento de globos o lámparas de deseo al cielo, un espectáculo digno de ver.
- Aventura: el norte es la zona de Tailandia donde más opciones multiaventura se pueden encontrar. Hay multitud de recorridos con sus diversas opciones tanto de actividades como de duración: montar en elefante, senderismo, rafting, canoas, etc. Nuestra elección fue una ruta bastante intensa de trekking + montar en elefante + dormir con una tribu + rafting. Nos llevó dos días. El trekking fue durillo, ya que fueron bastantes horas andando, subiendo una montaña con barro y no estábamos acostumbradas, pero hicimos ejercicio, respiramos aire puro y vivimos una experiencia difícil de repetir.Se recomienda llevar buen calzado, repelente de mosquitos, algo de abrigo, un chubasquero, bañador y cambio de ropa por si acaso. Montar en elefante es una experiencia curiosa. Necesitas una tarima para subirte y es increíble lo grandes que son y lo imperceptible que pareces para ellos. Sin embargo, el verlos en cautiverio es un poco triste. A mi la experiencia me gustó, pero a la vez al bajar me sentí bastante mal de contribuir a que llevaran esa vida y de que tengan que ser así tratados. Dormir con la tribu es una experiencia distinta que recomiendo. Estas personas no tienen luz, ni agua corriente. Viven de la ganadería y de sus manualidades. Dormimos en una cabaña fabricada también con bambú o similar. Cada persona tenía una colchoneta y mantas y una mosquitera para cada dos. Las cabañas están elevadas sobre el suelo, no tienen baño, por supuesto, y constan de dos estancias: una que hacía de dormitorio, donde dormimos todos, y otra donde comimos sentados en el suelo sobre alfombras. Lo mismo que subimos, al día siguiente lo bajamos por otra ruta con parada en una cascada a darnos un chapuzón.Posteriormente hicimos rafting. Es muy suave, no os esperéis nada parecido a los Pirineos, tomáoslo como un paseíto por el río. No os pongo foto porque dejamos todas nuestras pertenencias en un camión, pero imagináoslo como una balsa hecha de bambú.
Hasta aquí nuestros itinerario por la zona norte.
Otras opciones que tenéis son:
- Chiang Rai: donde se acude normalmente a visitar la tribu de las mujeres jirafa. Antes de viajar, supimos que esta tradición la mantienen únicamente porque atraen turistas y nos pareció tan denigrante que ni nos lo pensamos.
- El triángulo de oro: punto donde confluyen las fronteras de Laos, Myanmar y Tailandia y puede recorrerse en barquita.