Revista Diario

Chica calzedonia

Por Belmunin

Supongo que todos conoceréis la marca Calzedonia y, para los que no, os diré que es una empresa italiana que comercializa productos tales como leggins, calcetines, medias etc. Los artículos que se pueden encontrar en una tienda Calzedonia destacan por su calidad, por su modernidad y porque son muy ponibles. Están dirigidos especialmente al sexo femenino, pero también se pueden encontrar algunos productos para hombres, principalmente calcetines.

Pues os cuento otra de mis odiseas… Desde el viernes 13 de diciembre me he convertido oficialmente en chica Calzedonia. Y es que como, de momento, mi trabajo como profesora, traductora e intérprete no cubre demasiadas horas semanales, he optado por buscarme un trabajo de media jornada que me permita compaginarlo con mi verdadera profesión y vocación. 

Fue hace unas semanas cuando tomé la decisión de solicitar un puesto como vendedora  a media jornada para una de las tiendas Calzadonia de Berlín y fue el jueves 14 de diciembre cuando yo, junto con otros solicitantes, hicimos una entrevista conjunta en la sala de un hotel en Charlottenburg con el equipo de chicas Calzedonia. Lo cierto es que yo era la única chica extranjera en medio de un grupo de chicas alemanas de pura cepa: altas, rubias y morenas, piel clara, muy arregladas para el momento y bastante serias. Yo era la excepción: chica española, 1,50 m, medianamente arreglada (venía de cuidar al bebé de unos amigos) y alegre. Primero nos presentamos y en una de las pruebas tuvimos que resolver un caso práctico de grupo. En cada momento, todo el equipo nos observaba y tomaba notas, especialmente cuando expusimos el caso práctico. Lo cierto es que yo no estaba nada nerviosa aunque bastante segura de que mi perfil no les interesaría.

Sin embargo, no fue así. El día 13 me llamaron y me dijeron si quería empezar ese mismo día de 15:00 a 21:00. Yo, impresionada, dije que sí. Después de todo, tenía experiencia de la tienda de souvenirs donde trabajé en verano y no tenía nada que perder, ¡ya me había ganado allí al público alemán! jeje. Aunque el metro me jugó una mala pasada, pues hubo un problema e hizo que llegase quince minutos más tarde a mi primer día de trabajo (avisé previamente por teléfono y no pasó nada), todo fue mejor de lo que esperaba: la encargada Caro y mi compañera Varinia me resultaron encantadoras, aunque eso sí, Caro muy exigente y metiéndonos mucha presión: "Hay que ir a por el cliente, sed agresivas, saludad y despedid siempre, preguntad si necesitan ayudan, en la caja mucha concentración etc etc. etc." Esas fueron solo algunas de sus frases traducidas del alemán, pues la filosofía de empresa es vender, vender y vender mucho.

Y tras firmar el contrato, enseguida llegaron los detalles de Calzedonia. En primer lugar, una tarjeta de descuento de un 30% para cualquier producto de la firma. En segundo lugar, el uniforme para el mes de diciembre, para el que pude escogerme lo que quisiera con tal de que fuesen unos leggins y un par de medias. Y estas fueron mis elecciones:


CHICA CALZEDONIA

Mis dos pares de medias y el gorrito de Papá Noel que llevamos en la cabeza.


CHICA CALZEDONIA

Mis leggins por delante.


CHICA CALZEDONIA

Mis leggins por detrás.

Y lo más curioso es que me invitaron a la cena Calzedonia que ya tenían organizada desde hace tiempo en un restaurante, ¿adivináis?, ESPAÑOL. Fue muy curioso cuando llegué allí y vi todos los jamones ibéricos, paelleras y demás comida tradicional española. Fue una invitación que disfruté en compañía de otras chicas que trabajan para la empresa en Berlín. Pasamos una velada muy agradable en la que, además y envueltos en papel de regalo,intercambiamos objetos que teníamos por casa de los que nos gustaría deshacernos.

Este es el que me toco a mí. Un puzzle de una chica…¿gótica? Muy curioso, jeje.


CHICA CALZEDONIA

CHICA CALZEDONIA

Y estas son las fotos de nuestra velada en el restaurante "Tauro":


CHICA CALZEDONIA

CHICA CALZEDONIA

CHICA CALZEDONIA

CHICA CALZEDONIA

CHICA CALZEDONIA

Y ahora solo queda… ¡SEGUIR TRABAJANDO! Sea donde sea, ante una clase o ante un cliente. Uno nunca sabe donde podrá terminar, así que lo más importante es disfrutar de las pequeñas oportunidades que nos regala la vida y aprender de todo y de todos los que nos rodean.

Volver a la Portada de Logo Paperblog