China advierte que la independencia de Taiwán “significa guerra”

China endureció su lenguaje hacia Taiwán este jueves, advirtiendo después de las recientes actividades militares intensificadas cerca de la isla que “la independencia significa guerra”. Además indicaron que sus fuerzas armadas estaban tomando medidas para responder a la provocación y la interferencia extranjera.

Taiwán, reclamado por China como su territorio, informó que varios aviones de combate y bombarderos chinos ingresaron a la zona de identificación de defensa aérea del suroeste de la isla durante el fin de semana, lo que generó preocupación en Washington.

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China cree que el gobierno elegido democráticamente de Taiwán está impulsando a la isla hacia una declaración de independencia formal, aunque la presidenta Tsai Ing-wen ha dicho repetidamente que ya son un país independiente llamado República de China, su nombre formal.

“Las actividades militares llevadas a cabo por el Ejército Popular de Liberación de China en el Estrecho de Taiwán son acciones necesarias para abordar la actual situación de seguridad en el Estrecho de Taiwán y para salvaguardar la soberanía y la seguridad nacionales”, dijo.

“Son una respuesta solemne a la interferencia externa y las provocaciones de las fuerzas de la ‘independencia de Taiwán’”, agregó.

Esfuerzos de intimidación

El Taiwán democrático ha denunciado las amenazas y los esfuerzos de intimidación de China, y Tsai se ha comprometido a defender la libertad de la isla y no ser coaccionada.

China describe habitualmente a Taiwán como su tema más importante y sensible en las relaciones con Estados Unidos, que bajo la antigua administración Trump aumentó el apoyo a la isla en términos de venta de armas y altos funcionarios que visitan Taipei.

El gobierno del presidente Joe Biden, en el cargo durante una semana, ha reafirmado su compromiso con Taiwán como “sólido como una roca”, lo que podría augurar más tensiones con Beijing.

El miércoles, el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, reafirmó el compromiso de Washington con el apoyo de las naciones del sudeste asiático en una disputa de larga data con China por la soberanía en el Mar de China Meridional.

Blinken “se comprometió a apoyar a los demandantes del sudeste asiático frente a la presión de la República Popular China”, dijo el Departamento de Estado en un comunicado, refiriéndose a China por su nombre formal.