Unos 3.000 millones de dólares serán invertidos por China durante el próximo trienio para ayudar a los países en vías de desarollo a afrontar las consecuencias de la pandemia.
La serie de ayudas fue anunciada por el presidente de la nación asiática Xi Jinping quien además pidió “no politizar la pandemia ni el virus”, durante su intervención en en la cumbre del G20 de Sanidad que se celebra en Roma
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«Continuando con nuestro apoyo a la solidaridad global contra la COVID-19 anuncio que China aportará otros 3.000 millones de dólares en ayuda internacional en los próximos tres años en ayudas a la crisis social y económica en países en desarrollo», dijo por videoconferencia.
Esto se suma al reparto de unas trescientos millones de dosis de vacunas que ya ha distribuido, explicó.
«Debemos mantenernos unidos y promover la coordinación y la solidaridad», así como «rechazar los intentos de politizar el virus», añadió.
Asimismo propuso un foro internacional para cooperar en la elaboración de las vacunas y su reparto «justo e igualitario» para trabajar de forma conjunta por «un futuro más saludable para toda la humanidad».
Los líderes del G20 se reúnen hoy telemáticamente bajo la presidencia de turno de Italia para analizar la experiencia de la pandemia del coronavirus y buscar políticas que eviten futuras crisis y palíen las consecuencias de la actual.
La cumbre, con políticos, científicos y exponentes de la sociedad civil, es coordinada desde Roma por el primer ministro italiano, Mario Draghi, y por la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, organizadores del foro.
Con información de EFE