Dicen que cuando llevas a alguien en tu corazón de algún modo sientes la tranquilidad de que no lo perderás nunca, yo creo que es cierto. Siento que siempre llevo conmigo a aquellas personas que recuerdo con amor y cariño cuando no están a mi lado y con más intensidad a aquellas que por desgracia ya no volveré a ver de cerca.
Esta mañana he descorazonado a dos manzanas y me he sentido un pelín asesina. Pero todo ha sido por una buena, sana, enriquecedora y bonita causa: preparar Chips de manzana.
Como una imagen vale más que mil palabras..
Por si acaso tienes dudas, aquí puedes consultar la preparación:
- Precalienta el horno a 100 grados.
- Coge un par de manzanas, con la ayuda de un pelador quítales el corazón y a continuación pelalas. Córtalas en finas rodajas, cuanto más finas mejor (para que se tuesten mejor en el horno).
Colócalas sobre la rejilla del horno y espolvorea un poquito de azúcar. Durante un par de horas déjalas tostar en el horno sin cerrar del todo la puerta de éste. Evitarás que se quemen y además el olor a manzana al horno es una maravilla!
Pasadas las dos horas -quizá tu horno necesite menos tiempo, es importante que estés pendiente- retira las rodajas de manzana de la bandeja, mételas en un recipiente hermético y ciérralo hasta que vayas a servirlas.
Ya tienes listos tus chips de manzana!
Mmm... Crujientes, sabrosos, ligeros y muy sanos!
Y para acompañar el momento, que suene Apples de The Seasons!
Feliz jueves,
A.