Chooper se presenta como el sustituto de R2-D2, uno de los droides más queridos, para Star Wars Rebels, la serie de animación de Lucasfilms para Disney. Hace poco se dio a conocer al Inquisidor Imperial como el villano, y ahora toca la contrapartida y llega este carismático personaje, C1-10P, al que conoceremos como Chooper.
La serie narrará todo lo sucedido entre el episodio III y IV de la saga en cine de Star Wars y se situará, para ser más precisos, catorce años después del final de La venganza de los Sith. La historia seguirá a la tripulación de la nave Ghost, que combatirá al Imperio y a su tropa de Stormtroopers.
El estreno está previsto para emitirse en 2014 primero por Disney Channel y después en Disney XD.
Volviendo a Chooper, ese simpático droide astromecánico, que nos recordará mucho, sobretodoen sus soniditos y su esencia, a R2-D2, pero que nunca podrá sustituirle. Los creadores del personaje afirmaron: “Si R2 podría ser tu perro favorito, Chopper es un gato”, y se le presenta como un “droide astromecánico perezoso y con muy mal humor”, pero eso no quita que sea un buen compañero y siempre lleva a cabo, a su manera, lo que se le pide. La mayor diferencia con su antecesor es que los brazos de Chopper se doblan hacia fuera, en vez de hacia delante.
El diseño de Chooper se inspira en los bocetos de Ralph McQuarrie para R2-D2, conservando la estética. En cuanto al Inquisidor Imperial, (también tendremos el gusto de ir conociéndole) es el encargado de acabar con los caballeros Jedi, bajo las órdenes de Darth Vader.
A continuación un vídeo del proceso creativo de Chooper: