"Me sentía un poco cansado, me apoyé contra la ventanilla y tuve aquella visión de mi madre, que había muerto hacía tiempo, y ella me decía: ¿qué demonios estás haciendo aquí? Y alguien había dicho en una conversación que aquélla no era precisamente la autopista del éxito, y entonces me vino esta idea. Pensé que aquélla era más bien la carretera del infierno".
Estas palabras pertenecen al músico británico Chris Rea, con ellas quiso expresar la necesidad que tenía de hacer un disco diferente de los anteriores, un álbum conceptual en el que trató de reflejar algunas de las preocupaciones que, a finales de los ochenta, inquietaban a los padres de aquella generación del llamado "estado del bienestar"; preocupado por el mundo que heredarían sus hijos, Chris Rea nos habla, en su noveno disco de estudio, de temas como la emigración causada por el desempleo, el sensacionalismo de los medios de comunicación, el deterioro medioambiental, la corrupción e incluso su propia crisis religiosa. Este álbum, publicado en 1989, fue titulado " The Road to Hell", a la postre uno de sus discos más exitosos; algunos de los temas, como " Texas", " Daytona" o " Tell me there's a heaven", fueron muy radiados y utilizados en espectáculos deportivos y por asociaciones en contra del maltrato infantil. Con todo, la canción estrella de este álbum es la titulada igual que el disco, inspirada en un atasco; en realidad son dos canciones, las dos primeras del Lp: "The Road to Hell (Parte 1)" y " The Road to Hell (Parte 2)". Algo menos de nueve minutos y medio donde se condensa la esencia del mejor Chris Rea. La lluvia, una de las protagonistas de la canción, es lo primero que escuchamos, entremezclada con las noticias de la radio, los teclados y una sensación de crescendo, inquietante y triste, que nos prepara para la rugosa voz de Chris y el mágico sonido de su guitarra tocada con la técnica . La segunda parte comienza hacia el minuto 4:50, más alegre y con una absorbente sección rítmica que acaricia el sonido mágico, cristalino, que emana de la elegante guitarra de Chris. Si nueve minutos y medio os parece mucho, probad con la segunda parte (cuatro minutos y medio), en realidad el tema que fue lanzado como single; también existe una versión extendida, con una duración intermedia (unos siete minutos).
De Chris Rea me he ocupado en una entrada anterior, la dedicada al tema " On the Beach"; en ella traté de poner en valor su faceta como compositor y guitarrista. También utilicé aquel post para anunciar mi período vacacional bloguero; un año después vuelve a parecer Chris Rea en este blog, con el tema mencionado por varios de vosotros en los comentarios realizados en aquella entrada publicada el 27 de julio de 2016. Queridos amigos, entramos en "modo vacaciones"; volveremos en septiembre con nuevas canciones y una reducción en el número de entradas semanales, con el ánimo de dosificar esfuerzos y no cansar demasiado a la parroquia; dos entradas semanales en lugar de tres que, salvo causas de fuerza mayor, serán publicadas los martes y los viernes. Un fuerte abrazo para todos.