Christian Dior bajo la dirección artística de Raf Simons presentó en los jardines del parisino Museo Rodin su colección de Alta Costura para la primavera verano 2014 en la pasarela Haute Couture París. Una colección fresca en la que el blanco es sin duda el gran protagonista.
La mítica maison con tantos altibajos en los últimos años parece ser que ha encontrado la estabilidad y es que Simons en esta cuarta colección ha sabido encontrarle el punto demostrándonos su savoir faire.
El desfile de Christian Dior Haute Couture ha sido un homenaje a la elegante feminidad de los códigos clásicos de la maison fusionados con la visión minimalista y futurista del diseñador reverenciando la cualidad arquitectónica del trabajo de Christian Dior al igual que la suya propia.
A medida que se iba produciendo el show saltaba la alerta tendencia, ¿son las sneakers el nuevo stiletto?
La imparable revolución del estilo sport no sólo lleva protagonizando varias temporadas muchos de los desfiles de prêt-à-porter, sino que también se ha colado en los desfiles de haute couture.Raf Simons propuso zapatillas deportivas para complementar algunos de los outfits, al igual que lo hizo Karl Lagerfeld al día siguiente en su desfile para Chanel, el cual ha sido uno de los más aplaudidos en la semana de la alta costura.
La colección de Dior fue presentada en un espacio extremadamente íntimo, con estructuras blancas de yeso y un halo claramente futurista. Nada queda ya de la teatralidad de Galliano, nuevos aires para la casa Dior, los cuales hay que reconocer que al principio nos tenían a la expectativa de si encajarían o no, pero queda claro que se ha demostrado que sí, que Raf ha sabido respetar la esencia de la firma sin perder la suya propia, haciendo de ello una fusión perfecta, donde la geometría es el pilar fundamental.
Podríamos definir la colección como la consolidación definitiva del diseñador belga en la maison francesa. Lazos, silueta bar y peplum, los clásicos de Dior, se han mostrado más desnudos que nunca esta vez. Se le ha dado gran importancia al volumen, la asimetría de largos y los colores blanco y negro aunque con alguna pincelada de nude.
Las flores han hecho acto de presencia pintadas a mano sobre ligeras túnicas de seda, dando una vuelta de tuerca más a la inspiración oriental.