Revista Educación
Los seres fantásticos que protagonizan muchos de los mitos griegos son un gran aliciente para acercarles al lenguaje oral, escrito, plástico y para despertar su imaginación. Este viernes les conté la historia de Ulises, el cual, de regreso a su hogar, llegó a la isla de los cíclopes, gigantes con un solo ojo y quedó atrapado en la cueva del cíclope Polifemo... Si queréis conocer el desenlace pincha en la imagen.
Tras escuchar el cuento nos dispusimos a crear nuestro propio cíclope, un folio con un ojo y alrededor de él tenían que dibujar "al monstruo" y pintarlo con acuarelas.
Así de terroríficos nos han quedado.Luego decidimos llevarlos al inframundo junto a las "medusillas", allí estarán mejor.