La violencia contra la mujer tiene múltiples focos de análisis, desde el que considera la agresión a la mujer como parte de un sistema de normas sociales de conducta, dentro de las cuales es legítimo golpear, mutilar, encerrar o expulsar a las mujeres, siempre que infrinjan leyes establecidas; un enfoque biologicista, que considera que dicha violencia es el resultado de procesos individualizables vistos en contextos específicos, otro enfoque evolucionista que considera que está asociada a historias personales de carencias, enfermedades o privaciones particulares de los involucrados, (Pobreza, falta de educación, etc.), hasta el enfoque feminista que se basa en la comprensión de las inequidades entre los géneros.
De acuerdo con esta última corriente, la violencia estaría originada en los valores patriarcales que ordenan a los hombres el dominio y el control de las mujeres. (MDGF, 2010, p.26). "El objetivo de la violencia en general es poseer o demostrar control sobre el otro pero para que haya control [...] se requiere de una internalización de las normas y valores (dominación simbólica), por parte de los subordinados, de las víctimas y de gran parte de la sociedad que refuerce y legitime estas conductas, esto es, una especie de cooperación a nivel casi inconsciente" (Castro, R y Casique I, 2008, p.38). Por tanto debemos tratar de romper el modelo patriarcal de organización social que no permite la inclusión de la mujer en la construcción de una sociedad igualitaria, donde podamos todos sin limitaciones de orden socio económico o de género, trabajar por el bien común, sin estereotipos.
Desarrollo:
En el año 415, en Alejandría ( Egipto), hubo un crimen del cual fue víctima Hypatia, una de las primeras mujeres que dedicaron su vida a la filosofía. Hypatia gozaba de autoridad intelectual y respeto entre la clase dirigente de Alejandría. Matemática, filósofa, hija y discípula del astrónomo Teón, escribió además sobre geometría, álgebra y musicología, entre otras. Entregada al libre pensamiento y a la enseñanza, fue considerada como un peligro al cristianismo y al poder originado por la religión, ya que creía en las leyes de la naturaleza racional y la capacidad de la mente humana liberada de dogmas, a causa de lo cual encontró la muerte de forma trágica e inmerecida, convirtiéndose en una víctima simbólica de las cambiantes circunstancias de la historia. Crimen político, extremismo religioso, guerra de poder, quizás nunca los historiadores lo puedan determinar.
También defendió un tipo de educación basado en la escuela laica que alejaría las mujeres de la ignorancia que las mantenía bajo la dependencia de los hombres. Hacer a las mujeres no solo de buenas costumbres sino también Libres.Ahora bien, En otro tiempo histórico y después de muchos siglos de haber sido vilmente asesinada Hypatia de Alejandría, encontramos a María Deraismes, una aguerrida activista de los Derechos de la Mujer quien en 1866, se unió a la Société de la revendication des droits de la femme, una organización feminista que promovía la educación igual para las mujeres, y quien sostuvo tenazmente el combate para que les fueran otorgados a las mujeres los derechos civiles y políticos que la sociedad de aquella época les negaba.
María Deraismes en la sesión de apertura del Congreso Feminista de 1889 en París Dijo:
"Se prepara una gran revolución, la más grande, la más fecunda que se haya visto y se hará sin insurrección en la calle, sin barricadas, sin dinamita. Se hace en este momento en las conciencias, se hará pronto en las leyes. Para esto bastará restablecer la ley del orden (natural): que los dos factores de la humanidad sean igualitarios y no jerárquicos. Este es el precio del desarrollo continuo e indefinido del progreso de la humanidad".
María Deraismes ha quedado bien reconocida en la historia del feminismo ya que logro establecer los fundamentos legales para la emancipación de la mujer como persona y la igualdad de derechos y oportunidades respecto al varón en todas las esferas de la vida pública.
En su gran legado y antes de morir dijo: "Permaneced unidas, ayudaos, socorreos. Y no permitáis nunca que se rompa vuestra cadena de unión. Que el eslabón que va a romperse no sea causa de debilidad, y soldándole numerosos eslabones nuevos acrecentad la fuerza de la cadena. No olvidéis que la puerta del Templo debe permanecer abierta para nuestros hermanos y nuestras hermanas. La masonería que se ha practicado hasta ahora pertenece al pasado. Vosotras mis hermanas, practicad la masonería del futuro. Os dejo el Templo inacabado, buscad entre sus columnas el Derecho de la Humanidad".
Conclusión.
Como sabemos tanto Hipatia de Alejandría como María Deraismes fueron grandes guerreras, que lucharon por legitimar entre otros, el derecho a la educación de la mujer en igualdad al hombre, además de luchar por la igualdad social y de género.
Un sistema de educación incluyente donde hombres y mujeres tengan las mismas posibilidades de aprendizaje es básico para darle a la mujer la oportunidad de generar cambios en la sociedad donde se desenvuelve.
Nadie puede negar que las mujeres que han estudiado mejoran el entorno y la sociedad en la que viven, contribuyen en la economía y ayudan a acabar con los estereotipos de género. Disminuir los niveles de violencia contra las mujeres es una de las prioridades de la sociedad actual. Por tanto nuestra augusta institución no debe ser indiferente a esta lucha, no me refiero solo al Derecho Humano, sino a la Masonería Universal, sin distinción de géneros, sin distinciones arcaicas escudadas en leyes que fueron dictadas en un entorno pretérito, ya poco valido en el tiempo actual, dándole oportunidad a la Institución Universal de verdaderamente ser justa, igual y moderna, por fin Perfecta.
Es mi palabra.
- MDGF, Programa integral contra violencias de género. (2010) Estudio sobre tolerancia social e institucional a la violencia basada en género en Colombia. Bogotá: Fondo de Naciones Unidas y el Gobierno de España para el cumplimiento de los objetivos de desarrollo del milenio, 2010.
- Castro, R y Casique I, Estudios sobre cultura, género y violencia contra las mujeres. México: Universidad Autónoma de México. Centro Regional de Investigaciones Multidisciplinaria, 2008.