Cifras para no dormir

Con motivo de la nueva reunión del G20, en Seúl, los servicios informativos están proporcionando datos y cifras que, a mí al menos, prodúcenme insomnio. 
En todo el mundo mundial, es decir, en el pleno Planeta Tierra, incluido los polos, que dicen ser también habitables, existen 220 millones de desempleados. ¿Que cómo los han contado? Ah!,  eso pertenece al secreto del sumario. 
Dando por cierta esta brutal cifra, en la que no se incluye el ingente grupo de desahuciados, bien por hambruna, bien por falta de agua potable, bien por puritita miseria, a nosotros los españoles, ricos excluidos, nos corresponden 4.600.000 parados.
Pensaba yo en esta mañana  en la que me hallo, si al presidente Zapatero le parecera esta cifra importante pero no urgente, urgente pero no importante, ambas cosas o ninguna de las dos, según el nuevo sistema de categorización zapateril, puesto en funcionamiento  a partir de la retirada del parlamento de la propuesta de ley de libertad religiosa. Habré de preguntarle.
Mientras esta cifra planea sobre el G20, los líderes mundiales hállanse metidos en una "guerra de divisas", en la que las monedas son usadas como herramientas competitivas para exportar más. Por ello, Estados Unidos ha puesto en circulación 600 mil millones de dólares, el euro ha comenzado su baile de sanbenito, que dícese de aquel que produce movimientos incontrolados, la deuda española es cada vez más cara, llegando a la peligrosa situación de la primavera pasada... y para que cansarles, datos y cifras para no dormir.
Dicen que el G20 está intentando un "acuerdo de mínimos" y yo preguntábame, hoy por la mañana temprano en que cogí mi caballo y me fui a pasear, sí, preguntábame, a qué se referirán esos mínimos acuerdos o acuerdos mínimos. ¿Será igual que aquello de los "efectos colaterales"? ¿Recuerdan?
Si ustedes quieren participar en una acción contra el G20, propiciada por Attac, acudan,  el próximo viernes, 12 de noviembre, aquellos que estén por los madriles y dispongan de su tiempo, a las 11 de la mañana a la Bolsa de Madrid (Plaza de la Lealtad, 1). Habrá una performance que podrá en evidencia la especulación con las materias primas, la falta de alimentos, la falta de voluntad política para reformar el sistema financiero y establecer el impuesto sobre las transacciones financieras internacionales, y un largo etcétera que a buen seguro les parecerá interesante.