Cinco elementos que hacen especial a Majora's Mask...

Ais Majora's, amado u odiado, vilipendiado o mitificado... contigo no valen los términos medios...No sé si escribiré un análisis del remake de 3DS próximamente, pero si me apetece hablar, CON POSIBLES SPOILERS, sobre los elementos que hacen especial al juego, centrándome en los cinco que, para mí, son los más importantes.¿Y por qué los puntos suspensivos? Porqué lo mismo hay artículo a la contra, sobre este mismo tema.

Y es que Majora's Mask es un Zelda muy suyo, y las comparaciones con el resto de títulos de la saga se hacen incluso complicadas. Así que mejor centrémonos  en él mismo.
1º elemento: El planteamiento.
A ver si nos entendemos, estamos en un mundo nuevo en el que, por avatares del destino, acabas transformado en un deku y, cuando crees que esa es tu mayor preocupación, te das cuenta de que quedan tres días para que la luna se caíga sobre tu cabeza. Todo correcto.

Plantear un juego de aventuras con tres días de límite y con la posibilidad de viajar por el tiempo al primer día es... cuanto menos arriesgada, y difícil de explicar.Este elemento condicionó mucho el desarrollo del título, alejándolo varios enteros de lo que es un Zelda habitual, teniendo un camino mucho más predefinido que otros. Pero creo que francamente se hizo un trabajo soberbio, Majora's Mask no es solo un Zelda único, si no que es un juego único.
2º elemento: La ambientación.
A ver, un Zelda con un planteamiento tan extraño está claro que no podía tener un ambientación normal. Para la ocasión se creó un mundo, Termina, mucho más oscuro que Hyrule, tanto en lo obvio como en el trasfondo. Creo que pocas cosas salidas de Nintendo son tan inquietantes como el vendedor de máscaras en Majora's Mask.

De hecho el que el mundo se vaya a acabar tan abruptamente influye mucho en como vemos a algunos de los personajes. Algunos intentan evacuar desesperados, otros se resignan a la muerte... No sé, Majora's Mask pierde un poco de la inocencia de la saga para adentrarse en un, sútil, reverso tenebroso.
3º elemento: Skull Kid.
Directamente heredado de la ambientación... tenemos a uno de los mejores enemigos de la historia de los videojuegos.Ganon mola, ok, pero no deja de ser el arquetipo de enemigo ultrapoderoso con delirios de grandeza y un vicio especial por el secuestro, nuestro amigo Skull Kid no tiene nada que ver...

El villano de Majora's Mask es un niño que ha sido marginado y maltratado por todos los que le rodean. Débil, y sin ningún rasgo que le haga destacar positivamente, solo cuenta con la compañía de sus dos hadas, que le salvaron la vida en una helada y lluviosa noche en la pradera de Termina.Un chico así de repente se encuentra con un poder, que no puede entender, dado por la máscara de Majora... Skull Kid es muy peligroso, pero es imposible no sentir lástima por él.
4º elemento: Las quests secundarias.
Estamos acostumbrados a que en los Zelda el mayor peso de la aventura se lo lleven las mazmorras, en esta ocasión no es precisamente así. Las quests secundarias de Majora's Mask giran sobre la gran cantidad de máscaras que podemos conseguir a lo largo de la aventura y sobre los espectaculares habitantes del mundo de Termina.

Entre todas las quests destaca sobremanera el drama vivido entre Anju y Kafei, pareja de prometidos a los que el destino no se ha conformado con tirarles la luna encima, si no que les ha puesto mil y una trampas para impedir su enlace, y solo Link puede ayudarles. En cualquier caso entre unas y otras tocaremos temas como el amor, la responsabilidad, e incluso, un poco, la picaresca... ¿Cual es una de las cosas que todo el mundo dice que hará si puede viajar en el tiempo? Pensad un poco, Link hace lo mismo xD.
5º elemento: Las transformaciones.
Link se puede transformar, máscara mediante, en deku, zora y goron en Majora`s Mask, tres de las razas más importantes, si no las que más, del universo Zelda.
Esto le da un enfoque muy curioso a la aventura, ya que aunque el universo de la saga es bastante rico no habíamos tenido oportunidad, hasta el momento, de tener contacto directo como jugadores con el resto de razas del mismo. 

Hasta la salida de Hyrule Warriors el único modo de sentir la fuerza de un goron era echar mano al primer juego de la era Aonuma sí, pero más que una anécdota es un puto de vital importancia en el desarrollo del título por la variedad que le da al mismo. Las máscaras de goron, deku y zora son un  objeto que, por decirlo de alguna manera, abarca distintos objetos por la variedad de habilidades que otorga a nuestro pequeño héroe élfico.
Para mi estos puntos son los que, fundamentalmente, marcan el carácter de Majora's Mask y le convierten por méritos propios en uno de los juegos más de "autor" de toda la saga. Aonuma tenía la difícil tarea de crear algo propio de una saga que hasta entonces era guiada por la batuta del genio Miyamoto, y no se le puede discutir que, te guste o no, lo consiguió.