Cincuenta sombras de Grey (Sam Taylor-Johnson, 2015)

La verdad es la que es y ya nadie puede negarlo: Cincuenta sombras de Greyes el estreno del año. Sí, es muy arriesgado hacer una afirmación de estas características cuando no hemos completado ni dos meses del 2015 pero cualquiera que esté al tanto de la actualidad cinematográfica coincidirá en que lo que se está moviendo alrededor de esta película pocas veces se ha visto. Y lo que también es innegable es que la película está generando tantos odios como pasiones así que, la cuestión es ¿quién acierta, los que la ponen por los suelos o los que la ponen por las nubes? 

Anastasia Steele(Dakota Johnson) es una estudiante de literatura que debe encargarse de hacerle una entrevista a Christian Grey (Jamie Dornan) un apuesto y misterioso multimillonario. Anastasia se queda tan impresionada tras conocer a Christian que es incapaz de quitárselo de la cabeza pero lo que ella no se imagina es que él se siente exactamente igual que ella.
Vamos a empezar contestando a la pregunta que he hecho un poco más arriba, es decir ¿aciertan los fans o aciertan los haters? Pues, queridos míos, no aciertan ni unos ni otros porque Cincuenta sombras de Grey no es ninguna maravilla pero tampoco es la bazofia que muchos aseguran que es. Eso sí, todo depende del punto de vista que se tenga a la hora de analizarla. Me explico.

Tengo que decir que, de entrada, soy de las que se posicionaría, sin dudarlo, en el bando de los haters de esta película. Ni he leído los libros ni pienso hacerlo, no consumo ese género y ni la curiosidad me haría interesarme por un tipo de literatura que, con todos los respetos, considero bazofia. Pero con la película no me ha quedado otra que ir a verla, además de tener este blog, colaboro en varios medios de comunicación y si tengo que hablar de una película públicamente, es mi deber verla para poder criticarla. Así que esta semana he sido una más de los cientos de miles de mujeres que han ido al cine a ver esta esperada película. Y si tengo que deciros la verdad, como mujer me ofende enormemente el mensaje de esta cinta porque se agarra a estereotipos y clichés de lo más rancios que, en esencia, vienen a reafirmar esa estupidez de que a las mujeres nos gustan los hombres que nos dan caña, pero, como crítica de cine, no puedo negar que la película no está mal hecha y que tiene aspectos técnicos como la fotografía o la banda sonora que son bastante decentes. Por eso, desde que la vi, aún no he sido capaz de darle nota. 
En general, Cincuenta sombras de Grey es una película romántica de lo más típica cuya particularidad es que está rodada con bastantes más medios de lo que es habitual en este género. Eso y el sexo, claro, porque es hablar de esta película e, inmediatamente, tener que salir ese tema. Si os digo la verdad, a mí lo del tema del sexo no me motiva nada o casi nada como para dedicarle un extenso comentario en la entrada con lo que me voy a limitar a hacer un par de puntualizaciones y a seguir con otra cosa. Personalmente, creo que si las inclinaciones sexuales de Christian Grey son tan importantes en el desarrollo de la historia es lógico que haya escenas de alto voltaje pero ya os digo que a mí me hubiera dado exactamente igual que estuvieran o no. Vamos, que el hecho de que haya escenas calientes o no en ningún caso va a suponer un aliciente para que yo vaya a ver una película pero si sois de los que consideráis que es un aspecto importante creo que acabaréis satisfechos con lo que veréis en pantalla.

Mucho se ha hablado de la elección de los actores elegidos para desempeñar los papeles principales. Es la primera vez que veo a Dakota Johnson en pantalla así que no sé si ha dado todo lo que puede dar pero a quien sí que conocía era a Jamie Dornan y, la verdad, me ha decepcionado. Jamie Dornan es uno de los protagonistas de esa maravilla serie llamada de The Fall en la que da vida a un delincuente sexual que se dedica a acechar mujeres para, finalmente, asesinarlas. Dornan se sale en este papel y creo que, con estos antecedentes, esperaba mucho más de él. También tengo que decir que el doblaje no le beneficia nada, he visto la serie en VOS y la voz que le han puesto en español no le hace justicia con lo que desde el primer momento algo me ha chirriado en cada una de sus intervenciones. Sobre la química entre ambos, no sé qué deciros, porque por algún motivo que no tengo claro, no terminan de encajarme como pareja. Creo que el verdadero problema es que no me terminé de creer la historia de amor en ningún momento y por eso me cuesta aceptarlos como pareja porque la realidad es que la historia me pareció tan floja, tan tópica y tan predecible que no fui capaz de creerme nada de lo que vi en pantalla.
Como veis, Cincuenta sombras de Grey no ha dejado mucha huella en mí, ni para bien ni para mal. Sé que en un par de días la habré olvidado porque no me ha aportado absolutamente nada aunque tampoco ha llegado a parecerme un horror digno de ser vilipendiado ya que, simplemente, es una película mediocre que nos demuestra, una vez más, que éxito de taquilla y calidad no suelen ir unidas. 
PD: Si no lo digo reviento así que espero que nadie se ofenda pero lo que me parece absolutamente triste es que este tipo de folletines estereotipados, rancios y retrógrados tengan tanto tirón entre las componentes de mi género. Y lo peor no es que seamos las mujeres las que estemos acudiendo masivamente a ver esta mediocridad (los hombres también acuden masivamente a ver ciertas películas igualmente prescindibles) lo peor son los comentarios de las fans que justifican todas las cosas que aparecen en la película en aras de la “bonita” historia de amor que viven los dos. Cada pareja es libre y tiene derecho a poner sus propios límites pero en ningún caso podemos justificarlo todo en nombre del amor porque hay cosas que no son aceptables ni tolerables bajo ningún concepto. Por cierto, agradecería enormemente que se dejara de generalizar con este tema porque somos MUCHAS las que ni hemos leído esos libros, ni vamos a leerlos ni nos van a gustar las películas.
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