Cine | Pieles, dirigida por Eduardo Casanova

“Pues lo que quiero decir, es que hay gente que ha nacido para sufrir. Y si se le hace sufrir, no tiene importancia, porque han nacido para eso.”

“Las pieles cambian, las pieles se operan, se transforman, la apariencia física no es nada.”
Existen muchos ejemplos de cine kitsch como: Hairspray o Pink Flamingos del alabado director John Waters, Barbarella de Roger Vadim o Labyrinth con David Bowie, esto por mencionar algunos. Este tipo de cine se caracteriza por la exageración en el uso de colores muy llamativos y que combinan con la estética del filme, el uso de personajes poco convencionales en este tipo de industria para tocar temas de índole social o moral, hasta números musicales que rayan en lo extravagante. Es por esto, que no todo mundo simpatiza con este género y a algunos les puede llegar a parecer ridículo y frívolo.
En esta categoría entra Pieles, ópera prima del actor y ahora director, Eduardo Casanova. Este filme evoca lo grotesco y visceral de los hombres y hace un llamado a todos aquellos marginados o excluidos, dónde las deformaciones y aspecto físico conforman el argumento de esta cinta que busca hacer una crítica a una sociedad que se basa en prejuicios para funcionar y existir.
Pieles nace de una idea plasmada en un cortometraje llamado Eat My Shit, en este toma el protagonismo una mujer llamada Samantha (Ana Polvorosa) que tiene el sistema digestivo al revés (si, una cosa la tiene donde debería estar la otra). La idea de hacer un largometraje viene después de la reacción positiva que produce su lanzamiento y, por supuesto, la crudeza con la que se retrata la situación de una mujer en esta situación tan particular.

En la cinta se retoma la historia de Samantha y de otros personajes como Laura, una mujer sin ojos, un hombre pederasta que buscar saciar sus impulsos carnales ante una noticia inesperada, un adolescente con un trastorno que le impide ver sus piernas como suyas, una pareja con deformaciones y que se creen perfectos el uno para el otro, incluso, un hombre que sólo le atraen las mujeres con defectos físicos. Todas estas historias se cuentan de forma coral y se entrelazan, con todos estos que buscan encajar y encontrar alguna forma de amor en alguien. Aunque la sinopsis suena algo dramática y salvaje, la cinta tiene toques de comedia negra que pueden incomodar o ser del total desagrado del espectador.Cabe aclarar que existen algunas escenas muy NSFW.

La recepción que ha obtenido es muy variada, puede encantar o repugnar por igual. Ha competido en festivales muy importantes como el de Berlín; el de Málaga, donde ganó el premio del jurado joven y el Imagine Film Festival que le dio el premio a mejor película.
Pieles es una cinta muy original en una industria que se fundamenta en la perfección y lo estéticamente correcto. Está hecha para generar reacciones y opiniones, llama al debate de lo que es visualmente “correcto” y apela a lo más profundo del ser humano.