SORRY TO BOTHER YOU (ÍDEM, EU, 2018)Cassius "Cash" Green esta buscando empleo y no encuentra una mejor manera que mentir sobre sus referencias y logros al gerente de una empresa de ventas telefónicas, por supuesto que esto les agrada ya que demuestra que es un pillo mentiroso, justamente lo que necesitan en esas empresas, Cash entonces comienza su empleo preguntándose que sera de sus vida, el sueña con lograr algo mas, tener dinero y dejar algo para la posteridad, muy diferente a la manera de pensar de su potable novia Detroit (Tessa Thompson) que es una artista conceptual que trabaja en lo que puede, ambos viven en la cochera del tio de Cash (Terry Crews) que esta a punto de perder la casa por adeudos, hasta este momento hemos conocido a un tipo harto de su vida y unos estereotipos tipicamente negros, casi tocando el nivel de explotación, un ambiente que no desaparecerá en toda la cinta.
Cash no logra vender nada ya que es bateado irremediablemente con la titubeante presentación que da nombre a la cinta, algo que no parece deba cambiarse por el nombre de la empresa, pero un consejo de un viejo anciano (Danny Glover) le da la llave al éxito, debe hablar con voz de "blanco", el lo hace con la de Steve Buscemi, lo que le asegura la venta, a partir de este momento Cash desarrolla su voz de blanco exitoso (David Cross) lo que le da múltiples ventas alrededor del mundo y lo pone en la mira para un ascenso, mientras tanto el casi líder sindical Squeeze (Steven Yeun) lidera una huelga junto a Detroit y tonto amigo de Cash, Salvador (Jermaine Fowler), por supuesto en medio de esto la empresa le ofrece un ascenso a Cash, uno que no puede rehusar y al día siguiente por fin sube en el ascensor dorado que tanto deseaba donde una candente voz (Rosario Dawson) le recuerda que es mejor que los demas.
En ese lugar el jefe es el negro con estilo (Omari Hardwick) que le indica con su voz de blanco (Patton Oswalt) que ahi solo se habla con esa voz, y le dice que los negocias ahí en las altas ligas son vender mano de obra de WorryFree a otras partes del mundo, una empresa gigantesca que esta acusada de esclavismo corporativo a pesar de presentarse como una empresa socialmente responsable, amable y cool, como cualquier empresa tecnológica que le venga a la mente, con un CEO multimillonario y humanista que detrás de su fachada perfecta y agradable parece esconder al mismo demonio, pero los múltiples ceros compran de inmediato la conciencia de Cash que sigue vendiendo como loco al grado de que es invitado a la fiesta del CEO Steve Lift (Armie Hammer, bien) que es una orgía descontrolada que culmina en una reunión de negocios que parece salida de un libro de terror mala leche con mucho lsd.
Es asi que Cash se ve arrastrado a una vorágine de locura de la que no podrá salir tan fácilmente y que culminara en muchas dosis de locura, una ácida critica a la sociedad y la inutilidad de la bolsa de valores que no tienen escrúpulos y en donde los medios hacen héroes a los monstruos, hasta que llegamos a una locura desquiciada donde el revanchismo de la cinta toma la lógica de esta haciendo trampa porque si, una lastima porque el director y guionista Boots Riley había regalado una hora inicial que era muy buena y un inicio de la segunda que toca la excelencia por los disparates y la valentía que nos regala, es una lastima que el final sea tan tramposo y pareciera estar escrito para darle un final ya que de otra forma estuviéramos hablando de una gran obra, aun asi la cinta es mas que meritoria, comenzamos viendo una cinta sobre un perdedor que desea el éxito a como de lugar y que por ello es capaz de traicionar a sus amigos y pareja, y que cuando logra el éxito autoimpuesto por la sociedad ve por fin lo mas oscuro del sistema sin una oportunidad de redención como en ese negrisimo y bien logrado final.
Calificación: Muy Bien