Revista Cine
UN MIEDO INCREIBLE A TODO LO QUE EXISTE (A FANTASTIC FEAR OF EVERYTHING, REINO UNIDO, 2012)
En el dvd del titulo Simon Pegg hace una presentación donde parodia al mismo tiempo que homenajea a los titulos independientes que se atreven a algo más y que como bien dice estan condenados a tener exito en pequeños espacios cultureros cinefilos de ciertos lugares, incluso hace de cuenta que ya esta en hollywood y es una gran estrella y que ni siquiera recuerda de que va la pelicula o con quien la hizo para fingir su parodica muerte, supongo que un recordatorio para que él mismo nunca pierda el piso, y justamente esta cinta es un regreso a sus raices inglesas con poco presupuesto pero mucha imaginación, aunque no por eso significa que el resultado es bueno aunque por lo menos en esta ocasión es interesante, y digo esto no porque la cinta sea mala pero me da la impresión de que intenta abarcar demasiado y que sus actos son muy dispares entre si.
Despues de la vistoza presentación de creditos vemos al paranoico escritor Jack (Simon Pegg, muy bien) quien tiene un miedo increible a que un asesino lo mate debido a su ardua investigacion sobre asesinos de la época victoriana, la cosa ha llegado a tales extremos que cualquier ruido o sombra es una amenaza para el pobre diablo que se dedica a deambular por su casa en ropa interior mientras fantasea con asesinatos, fantasmas, y monstruos diabolicos, la segunda parte se pasa más de tuerca y abandona ese territorio tetrico de cinta clasica para mostrarnos más de Jack y sus fobias cuando su editora lo cita con un posible comprador a quien Jack cree un asesino y que lo lleva a lavar la ropa despues de una rapida sesión de terapia.
Esas escenas en la lavanderia son lo mejor y peor de la cinta, depende de como se que tan psicodelico le guste a uno el asunto, ahi los demonios internos y malentendidos ridiculos nacen por no saber usar la lavadora, un cuchillo pegado a la mano y mujeres chismosas, y de ahi pasamos al acto final que choca un poco con lo demás con asesino en serie en ristle pero al final los directores Crispian Mills y Chris Hopewell no se animan como uno quisiera y esas dudas pegan en lo que nos queda en la mente, eso si, las animaciones del segundo director son majestuosas, desde las tetricas hasta la última con simbolismo incluido, y se aplaude que se diferencien tanto, una interesante cinta que de todas formas queda a deber a pesar del gran esfuerzo de su protagonista.
Calificación: Interesante