Cinecritica: Voraz

VORAZ (RAVENOUS, REINO UNIDO, 1999) Debo admitir que la directora Antonia Bird hizo un buen trabajo en la cinta que ahora nos concierne, no solo por el rapido ritmo de la cinta que siempre nos tiene pendientes sino por tomar un tema tan controvertido como el canibalismo y mostrarlo con esa crudeza, de esa manera tan real que al mismo tiempo se siente mistica, donde a final de cuentas esa debilidad tan humana se nos muestra a los ojos y ello da más miedo que cualquier monstruo gigantesco o espiritu maligno, me refiero a la la naturaleza humana, esa que siempre busca la manera de sobrevivir aprovechandose de otros mostrada aqui en algo tan repugnante como el canibalismo, por ello el tema es dificil de tratar, porque aqui no se habla de personas que se vieron obligadas por las circunstancias, bueno en un principio si, pero despues simplemente se corrompen haciendo alusión a un cuento indio y donde el protagonista se rebate entre las dos opciones. El Capitan John Boyd (Guy Pearce) es un heroé de guerra pero su medalla la gano por hacerse el muerto y tomar a los mexicanos por sorpresa, por ello sus superiores lo condecoran pero lo castigan mandandolo a los confines del pais donde esta en un fuerte con otros raros castigados e indios, tambien el capitan ha perdido el apetito debido a que se bebio toda la sangre de su superior cuando estaba bajo él pasandose por muerto, en el deprimente fuerte tambien estan el debil Hart (Jeffrey Duncan Jones), el ebrio medico Knox (Stephen Spinella), el facista Reich (Neal McDonough), el religioso Toffler (Jeremy Davies), los indigenas de rigor y el drogadicto de turno (David Arquette), a este grupo de inadaptados le cae el sobreviviente Colqhoun (Robert Carlyle primero mesurado y despues sobreactuado como amerita su personaje) quien les cuenta una terrible historia de supervivencia que llevo a su grupo al canibalismo.

La historia aqui se mueve con seriedad, como si fuera un tetrico documental y cuando llegan a a cueva y descubren a verdad se desata el pandemonium del que escapa Boyd solo para llegar al fuerte y descubrir que la locura esta ahi, que el mismo diablo se ha alojado entre ellos y que solo él puede derrotarlo porque los demás lo consideran loco. No quiero contar más para no estropear las exageradas y desesperantes sorpresas, la segunda parte del filme es cinica y comica, con un humor negro descarnado, y la tercera desesperante y violenta, todo ayudado por la frialdad de Bird al filmarla, y por unos acordes que nos envuelven y nos llevan por derroteros que no considerariamos de no ser por ellos, ¿es divertido ver comer un hombre a otro hombre? ¿cazarlo como liebre asustada? a eso nos invita la musica, a  final Boyd debe tomar partido entre detener el monstruo o aliarse, porque la historia va más alla del canibalismo, nos muestra la inmundicia de la naturaleza humana devorandonos unos a otros aunque no sea literalmente.

Calificación: Bien