Perteneciente o relativo a un período de aproximadamente 24 horas.
La palabra que hoy os presentamos es un adjetivo que proviene de los términos latinos circa, "cerca", y dies, "día". Se aplica especialmente a ciertos fenómenos biológicos que ocurren rítmicamente alrededor de la misma hora, como la sucesión de vigilia y sueño...
...Y es que, todos los animales y plantas muestran algún tipo de variación rítmica fisiológica. Los ciclos circadianos han sido los más estudiados y su frecuencia les permite sincronizar a los ritmos ambientales que posean un valor de periodo entre 20 y 28 horas, como son los ciclos de luz y de temperatura...
Hemos de saber que la alteración en la secuencia u orden de estos ritmos tiene un efecto negativo a corto plazo. Así, muchos sufridos viajeros hemos experimentado el jet lag, con sus típicos síntomas de fatiga, desorientación e insomnio. La alteración de los ritmos circadianos a largo plazo, además, tendría consecuencias adversas en múltiples sistemas, particularmente en el desarrollo de exacerbaciones de enfermedades cardiovasculares... Así que ya lo sabéis... cuidaos en la medida de lo posible...
¡Hasta la próxima siesta!
(Sugerida por... 100ciosaurio)