Cita con la PDI

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Este fin de semana he viajado hasta Peñaranda de Bracamonte, un pueblecito de la provincia de Salamanca donde tiene su sede el Centro Internacional de Tecnologías Avanzadas (CITA) de la Fundación Germán Sánchez Ruipérez. Este centro se está convirtiendo en un referente en Educación y TIC y en un lugar de encuentro de intercambio de experiencias.
Me había invitado José Luis Sánchez a presentar una ponencia al evento y claro, siendo él amigo como es y representando a esa fundación, no sólo no me podía negar sino que significaba un honor y un placer para  mi acudir.
Este encuentro ha demostrado varias cosas. Por una parte, que la pizarra digital interactiva es una herramienta muy válida a integrar en un cambio metodológico en la forma de enseñar y sobre todo de aprender siempre que se utilice de forma diferente a como  utilizábamos la de tiza, que se aprovechen la interactividad que nos ofrecen los recursos que tenemos a nuestra disposición para que los alumnos construyan conocimiento, y sobre todo si cedemos el protagonismo y el uso y disfrute de la herramienta a nuestros alumnos. Así evitaremos convertirla en  un instrumento más de exposición plana y magistral de conocimientos, sin ningún valor añadido.
Por otro lado, a pesar de la que está cayendo y como decía Pep Hernández, de cierta gente que se aburre en los ministerios y nos están recortando hasta las ganas de seguir adelante con nuestra profesión, ha demostrado que nunca lo van a conseguir. Casi 100 docentes encerrados un sábado con buen tiempo primaveral durante muchas horas, dispuestos a compartir sus experiencias, a aprender y a disfrutar con su trabajo y el de los demás son testigo de lo que digo.
Os recomiendo ver los vídeos de las ponencias de mis compañeros Raúl Diego, Pep Hernández y Toni Solano que estuvieron especialmente brillantes, así como losde las comunicaciones de experiencias que se desarrollaron en salas simultáneas durante toda la tarde. Pronto estarán disponibles en el canal del CITA, .
Muchas gracias a José Luis, María y Carmen porque nos hicieron sentir como si estuviéramos en casa.