Ciudades de la llanura es la tercera novela de La trilogía de la frontera y une a dos personajes que ya conocíamos de las anteriores entregas. Me ha parecido inferior a la primera y al magnífico primer capítulo de la segunda. La historia de más entidad es la de amor que mantiene John Grady con una prostituta. La cosa no termina bien. Los diálogos muy buenos como siempre, y también aparecen las dosis de violencia habituales de McCarthy. Todo se desarrolla en 1952, Nuevo México, en el ambiente de ranchos, burdeles, whisky y caballos donde se desenvuelven los vaqueros. Hogueras, conversaciones, domas, historias, sueños.