Pinturas al agua: Tenemos, además de las tradicionales pinturas al temple, las más modernas pinturas plásticas, como son: la pintura al latex natural, al latex sintético (vinílicas) y las acrílicas, estas últimas las más modernas. Las pinturas al temple son mates, se aplican fácilmente y secan con rapidez.
Las pinturas plásticas por su parte tienen un tono satinado o mate, resultan también de fácil empleo y secan rápidamente. Un detalle importante a tener en cuenta a la hora de pintar recomendado por los pintores Madrid es que, en tanto que las pinturas al temple pierden (es decir, empalidecen el color que se ha preparado en el bote), las pinturas plásticas suben (o sea, que el color, una vez aplicado, es más intenso generalmente que el que tenemos en el bote).
Es conveniente, pues, antes de aplicar una pintura, realizar una prueba, pintando una hoja de papel de embalar o cartulina y cerciorándonos de si el color, una vez seco, es realmente el que deseamos. Este tipo de pinturas requieren que se dé una primera capa de imprimación, antes de dar la definitiva. Mientras que en las pinturas al temple, esta imprimación se resuelve con la misma pintura algo más diluida, las pinturas plásticas, o al esmalte, requieren una pintura especial previa, denominada aparejo o pintura selladora.
Gracias a dicha capa ahorraremos pintura definitiva y por lo tanto, resultará más económico. Por último es importante tener en cuenta a la hora de usar una u otra pintura, que las pinturas al temple son poco resistentes y no admiten lavados, mientras que las pinturas plásticas pueden ser lavadas, en varias ocasiones.
Pinturas sintéticas al esmalte: De acabado similar a las de aceite, son de más fácil aplicación y secan también más rápidamente (unas tres horas, aproximadamente). Si la pintura es de calidad, no amarillea. Pueden ser mates o brillantes, y tienen la ventaja de que se pueden dar a pistola, si se dispone de este aparato de pintura.
Este tipo de pinturas son especialmente útiles y son utilizadas en general por los mejores pintores Madrid en espacios como baños o cocinas, gracias a que aguantan en mejor medida la humedad, son más resistentes y en caso de producirse una mancha se limpian de una forma más sencilla.