La semana pasada nos enteramos del fallecimiento del artista guineano Mory Kanté a la edad de 70 años y hemos creído lógico y necesario dedicarle una entrada en esta sección, ya no por su música, de la que personalmente no conozco ninguna aparte de lo que nos ocupa, sinó por el lado nostálgico y sentimental.
Se trata de la canción Yé Ké Yé Ké, incluída en su disco A Paris, publicado por Universal Music el año 1984, aunque fué tres años después cuando decidió volver a grabarla, cuando le llegó el éxito y el reconocimiento masivo alrededor del planetaal también conocido como el griot eléctrico.
Esta nueva versión, que aparece en su álbum Akwaba Beach, se convirtió en el primer single africano en conseguir vender un millón de copias y ser número uno en ventas en varios países, incluído el nuestro. Años más tarde, concretamente en 1994, conoció una revisión de manos del dúo alemán Hardfloor.
Un insigne colaborador telúrico y servidor, hemos hecho de esta canción un pequeño mito nocturno, cantándola entre copas y pidiéndola a los dj's sin éxito alguno. Y eso pasa por el cariño que le tenemos, sinó las canciones, sea por lo que sea, no perduran en el tiempo.