Caminé en un parque
de hojas amarillentas, rojas y naranjas
una brisa que me hacia libre
y suspirar al mismo tiempo.
Caminé y te encontré
debatiéndome en la realidad y fantasía
el porcentaje aumentó
y la balanza se ha inclinado a la irrealidad
Eso que todo hombre promete
y al final es nada
¿Para que juegan con los sentimientos?
¡No entiendo! ¡no entiendo!
Ni a ti, ni a ningún otro
siempre predican amor
hablando en nombre de Dios
¡pobrecito él! y pobrecita yo
pobrecita todas aquellas
a las que le juraste amor
para terminar al lado
de la que nunca te amó