En Coaching Familiar facilitamos aprendizajes desde la propia persona, tomando esa importante iniciativa de mejorarnos cada dia en ese camino de nuestro crecimiento; no sólo crecer físicamente, también es importante crecer por dentro, madurar y ser mejores personas cada día.
Foto tomada de la red
En Coaching Familiar,nos facilta esas herramientas, para que en la medida de la madurez de los hijos les vayamos cediendo esa responsabilidad que desde su nacimiento hemos asumido como padres; no es saludable dar menos responsabilidad de la que los hijos pueden asumir según su grado de madurez, y al mismo tiempo no les ayudamos si seguimos asumiendo por ellos toda la responsabilidad por su vida. No nos levantamos un día y les decimos a los hijos: - Desde hoy eres el responsable de tu vida; es un proceso, ess más un ir dando las riendas con calma, es ir facilitándoles esa autoconfianza en si mismos, es reflejarles como les percibimos,y al mismo tiempo dejando que se vean a si mismos, sin que nuestras percepciones tengan más valor que las suyas . Es no confundir nuestra vida con la suya, es ser generosos dejándoles ser ellos mismos.
Nuestros hijos necesitan que les enseñemos a comprometerse con su vida, a vivir esos valores que son importante para dar contenido válido a sus vidas, les tranmitimos que definir sus objetivos facita tener una dirección en la vida, para ir descubriendo qué es importante para ellos. Nesesitan que les transmitimos esos valores que les den sentido, con los que se sientan identificados.
En todo momento les ofrecemos apoyo incondicional y afecto, que es la mejor de las medicinas para todos los males, les escuchamos para formarnos una imagen fiel de quíenes son. No confundimos dar afecto con permitirles todo; es más bien poner esos límites tan esenciales para una vida con sentido.
Nuestros hijos necesitan conocer sus emociones y saber cómo pueden ayudarles en su adaptación a la vida diaria. Sentir, expresar, reconocer y gestionar sus estado emocional y los de las personas con las que se relacionan.
Preguntarles para que ellos mismos busquen sus propias respuestas. Escucharles para que expresen como se sienten, interesarnos por qué piensan, y permitirles ser ellos mismos.
Educar a los hijos nos es marcarles el camino a seguir, es más mostrarles los distintos caminos para que ellos de forma madura y consciente vayan tomando las riendas y decidan que caminos seguir.
Sara Cobos
Coaoching Familiar