Coaching: En defensa del coaching

En defensa del Coaching

El Coaching es una actividad tan profesional, efectiva y admirable como muchas otras

No hace mucho en una Red Social alguien, sin duda de gran cultura pero no sobre Coaching, lo calificaba, entre otras cosas, de moda pasajera, de vender lo viejo con nuevas etiquetas y de ser un método que intenta convertir en panacea los problemas derivados de la interacción humana. Continuaba diciendo que “lo que sería digno de reflexión es la cuestión de por qué surgen estos entusiasmos cuyo ciclo de vida, normalmente no es largo”. Prefiero no transcribir la opinión en su totalidad. A continuación comparto la respuesta, completa, que redacté dirigiéndome a esta persona:

¿Y tú? ¿Has tenido que defender alguna vez el Coaching? Cuéntanos cómo.

Hola XXX,

Gracias por tu aportación, que plantea múltiples cuestiones acerca del Coaching, su pasado, presente y futuro. Ahí va mi reflexión sobre tu opinión de lo que has dado en llamar la “moda” del Coaching.

Una de tus primeras observaciones habla de la necesidad de reflexionar sobre las posibles razones del surgimiento del coaching y otros “entusiasmos” con los que al parecer lo comparas; desconozco el motivo de tal comparación puesto que poco tiene que ver, por ejemplo, el Process Management con el Coaching, salvo que ambos pueden ser aplicados en la empresa. Pero el Coaching no se aplica sólo organizacionalmente. Esto me hace pensar que tu visión del Coaching es quizá reducida al empresarial, cuando en realidad existen bastantes tipos de Coaching según su ámbito de aplicación: Personal, Organizacional, (dentro del que se engloban el Ejecutivo y Empresarial), Deportivo, Dietético… http://end2endcoaching.es/coaching-tipos-de-coaching-segun-su-aplicacion/

Es nuestra responsabilidad [de los coaches], evitar la propagación de impostores. No nos metas a todos en el mismo saco junto con los que llamas vendedores de lo viejo con nuevas etiquetas: esos, simplemente, ni son coaches, ni practican Coaching: una actividad tan profesional, efectiva y admirable como muchas otras.

Te refieres a la “casi total ignorancia de la historia en los que exponen este tema”. Tal vez exista esa ignorancia de la historia, sin embargo, he de puntualizar aquí la tuya propia respecto al Coaching, reiterando que las organizaciones no son el único ámbito de aplicación del Coaching. No dudo que haya mucho intruso, pero estoy segura de que quien ha recibido la formación adecuada conoce datos históricos sobre el Coaching que tú mismo no has tenido en cuenta o desconoces. Lo importante aquí es aclarar que tu propio desconocimiento respecto al Coaching y su historia es igual de comprensible y natural que nuestro hipotético desconocimiento de los datos históricos que tú aportas y que, por otro lado, no son esenciales para ejercer nuestra actividad. Quienes ejercemos el Coaching profesionalmente sabemos de dónde proviene y cuáles son sus influencias, al igual que sabemos, – y ya enlazo con tus dudas sobre la duración del Coaching -, que no es una moda de hace un par de años, sino de hace unas cuantas décadas (seis, y esto es un dato histórico). Sin embargo, para poner en práctica nuestra actividad, no tenemos que recordar al mundo constantemente que el Coaching reúne influencias http://end2endcoaching.es/coaching-influencias-del-coaching/ por citar sólo algunas:

• filosóficas de Sócrates a través del diálogo socrático y la mayéutica, Aristóteles, el existencialismo o el taoísmo;
• psicológicas, del cognitivismo en cuanto a las interpretaciones personales de la realidad; humanismo y psicología cognitiva;
• del enfoque sistémico que toma en cuenta el contexto en el que se desenvuelve el individuo;
• el análisis transaccional de Eric Berne;
• Maslow, Bateson, Dilts, la PNL…

Quienes ejercemos el Coaching profesionalmente sabemos de dónde proviene y cuáles son sus influencias

De modo que en realidad el Coaching no es, como describes, “tres recetas de distensión o superación de estrés u otras menudencias” ni una “simplificación que intenta convertir en panacea todos los problemas derivados de la interacción humana”. Tus conocimientos de historia son exquisitos. Seguramente tu vida y tu experiencia te han llevado a ese conocimiento extraordinario y admirable. Sin embargo el juicio que emites del Coaching y de quienes lo practicamos es descortés (habrá quienes piensen que ofensivo) y en todo caso debatible, y tú mismo lo reconoces al decir que haber coaches de verdad, los hay. Lamentablemente, como decía anteriormente, hay personas que ejercen sin haber obtenido la formación necesaria. No obstante ese es un tema aparte y un asunto que se ha de solucionar mediante ciertas regulaciones y cuya ausencia hace que haya personas que desconfíen. Es nuestra responsabilidad, dada esta carencia, evitar la propagación de los impostores. No nos metas a todos en el mismo saco junto con los que llamas vendedores de lo viejo con nuevas etiquetas: esos, simplemente, ni son coaches, ni practican Coaching, una actividad tan profesional, efectiva y admirable como muchas otras”.