Cobre para potenciar la inmunidad, fortalecer los huesos y proteger el corazón

Las propiedades del cobre no son tan conocidas como las del calcio, el hierro o el potasio. Sin embargo, es otro elemento fundamental para la salud del organismo, que debería incluir cualquier dieta equilibrada. Este mineral interviene en numerosas funciones fisiológicas: en el cerebro, en el sistema nervioso, el aparato cardiovascular (protege el músculo cardiaco y propicia la formación

de elastina, sustancia que mejora la elasticidad de los vasos sanguíneos), contribuye a evitar la destrucción producida por la oxidación de las células, mantiene el sistema inmunológico en el mejor estado, colabora en el crecimiento y la

fortaleza de los huesos, facilita la absorción de vitaminas y participa en la formación de glóbulos blancos, además de combatir la gripe o aliviar la fatiga primaveral.

Según datos del Centro Español de Información del cobre, en ausencia de este mineral nuestro sistema inmunológico (que nos defiende de las infecciones) falla, los huesos se hacen frágiles y pueden surgir estados de anemia. Está demostrado que la falta de cobre puede ser muy perjudicial sobre todo en embarazadas, bebés y personas mayores