No sé para qué nos gastamos dinero en comprar vehículos para los clics con lo divertido que es hacerlos.
Diego es muy impulsivo. Como vea una cosa y quiera hacerla, no tarda ni un minuto en preparar todo lo necesario y no para hasta que lo termina. Me pidió lo que necesitaba porque lo estaba viendo en un libro: una huevera, cartón, pegamento, celofán y unas tijeras.
Y se puso manos a la obra. Al final le tuve que echar una mano con el celofán para ensamblar las piezas de cartón y con una cuerdecilla que pusimos para sujetar el maletero, pero de todo lo demás se encargó él.
Un poquito de washi tape y listo. Estaba deseando terminar para montar a sus "ocupantes". Quedó bien ¿verdad?
Me encanta que se diviertan así haciendo manualidades.