Esta pregunta se responde por si sola. Solo piensa en el tiempo, ahorro, gasto y cuidado al planeta. Si no te interesa cuidar la capa de ozono, te interesa ahorrar dinero y entonces ya sabes la respuesta. Si no piensas en cómo la contaminación cada vez más hace estragos en el planeta, pero si piensas en el tiempo en que te gastas en ir al trabajo en el auto ya tienes una idea de por qué la bicicleta es la mejor opción. Y si eres de aquellos que piensan en los gastos, en el ahorro y en tiempo, la respuesta se define por si sola.
La bicicleta no solo es la mejor opción para cuidar el planeta de las emisiones de gases contaminantes de invernadero sino también para ahorrar tiempo. Un coche es una fábrica para crear partículas dañinas que van directo a la capa de ozono y esto te afecta a ti. Los beneficios de una bicicleta son muchos, sin embargo, no podría competir contra un coche cuando dices que vas a recorrer una distancia mayor de 100 kilómetros con tu familia, pero sí resulta ganando todas las mañanas cuando te diriges a tu oficina o a tu trabajo. Los trancones interminables de las capitales y de las ciudades principales hacen que recorrer una distancia de solo 10 kilómetros se vuelva toda una tortura.
Los semáforos en rojo, los pitos de los autos que vienen atrás y avanzar lentamente hace que nos estresemos y lleguemos al trabajo o a la casa con fuertes dolores de cabeza. Además, el gasto diario de gasolina, la compra mensual de repuestos y el pago anual de impuestos hace que nuestro bolsillo no aguante tanto. Y si pensamos en que en vacaciones queremos salir de viaje, pero por ese gasto que hemos tenido durante todo el año no vamos a poder hacerlo. Entonces qué nos queda. ¡No salir!En cambio, si utilizamos diariamente la bicicleta para ir al trabajo nos ahorraos primero el gasto de gasolina y segundo el pago de los repuestos. Si tenemos coche estamos obligados a pagar impuestos, con la bicicleta no. Pero al ahorrar con la gasolina y los repuestos, tendremos un dinero extra para salir en vacaciones al lugar que queramos.
No necesariamente es dejar de lado el coche. Es saber en qué momento usarlo. Se utiliza exclusivamente para trayectos largos y con la familia o amigos. Pero, si estás en la ciudad y vas a ir al trabajo, utiliza la bicicleta. Llegas en menos tiempo, con más energía y más vitalidad, sin estrés ni dolor de cabeza. Además estás contribuyendo para que la capa de ozono no se deteriore con la contaminación. Este es quizás el argumento más válido que se tiene al momento de ir a comprar una bicicleta. Solo piensa en lo mucho que estás ayudando si dejas el carro en tu casa y sales a pedalear. Te aseguro, además, que en un mes tendrás un cuerpo tonificado y atlético.