Los coches eléctricos pretenden ser un parte aguas en la industria automotriz, lo que ha valido la pena para que varios países apuesten por el cambio total del parque vehicular a futuro. Y es que, al parecer este tipo de transporte ofrece una gran cantidad de ventajas, en comparación con otro tipo de transporte impulsados por alguna fuente de energía; sin embargo, estás máquinas aún presentas algunas desventajas que se deben de ajustas.
En particular, el decidirse por el transporte eléctrico y modelos híbridos se vincula a beneficios como el intentar reducir el consumo de combustibles y repuestos, mientras que se intenta ayudar en la reducción del calentamiento global. Aún así, hay un ligero inconveniente y es que el funcionamiento que pueden llegar a otorgarse es totalmente silencioso, lo cual puede ser un verdadero peligro para peatones distraídos.
Lo anterior, como es de suponerse, también es parte de las costumbres que se tienen como peatones; ya que, la mayoría de personas se encuentran sumamente acostumbradas al ruido de un motor para reconocer que un vehículo se encuentra próximo o cercano. Por lo cual, se puede poner en riesgo la vida de las personas, sin no se toman las debidas precauciones, sobre todo en coches eléctricos.
Cuál sería el objetivo de que los coches eléctricos e híbridos produzcan ruido
Un panorama que ya analiza distintos países, y naciones de la norteamericana ya comienzan a tomar medidas para ello. Así es, esta nueva política (iniciativa de la Administración Nacional de Seguridad en el Tránsito de las Carretera -o por las siglas en inglés-) pretende que desde el 2019 todos los vehículos de impulsión eléctrica o híbrida deberán de realizar algún tipo de ruido (principalmente cuando viajan a baja velocidad) para de esta forma se percatados por peatones y reducir la tasa de posibles accidentes.
Para esto, se pretende que los coches eléctricos e híbridos cuenten con sistema de altavoces para que puedan producir algún tipo de alerte, sobre todo al circular a una velocidad inferior a 29,6km/h. Con esta medida se busca que los casos de atropellos se reduzcan a solo 2.400 casos por año.
Con la toma de esta decisión, se ha hecho necesario que varias compañías fabricantes comiencen a ver la forma de implementar algún sistema de altavoces de larga duración que además de externos puedan soportar las inclemencias ambientales (y es que al final de cuentas, si para el 1 de septiembre del próximo 2019, no se cuenta con algún sistema de alerta integrado, no se podrá vender o distribuir vehículo alguno que sea eléctrico o híbrido en la nación).
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