Cocina rápida y saludable

En esta ocasión traigo a otra invitada de lujo pues Marhya es una blogger ya consolidada que va a hablarnos sobre una de sus pasiones; una pasión que también es la mía y que todos deberíamos compartir pues es vital para nuestra subsistencia. Y es que comer bien es posible sin ser un gran chef, incluso teniendo poco presupuesto o el tiempo muy ajustado. Ella te lo explica a continuación:

Cocinar me encanta. Si me preguntáis, os daré una larga lista de motivos por los que me parece buena idea cocinar, empezando por lo relajante que me resulta, lo creativo que puede llegar a ser, lo satisfactorio que es preparar cosas ricas para las personas que te importan… Pero es verdad que muchas veces las obligaciones del día a día no nos dejan todo el tiempo que quisiéramos para cocinar. La mayor parte de los días muchas personas tienen horarios de trabajo complicados y llegan a casa a una hora en la que preparar la cena y, en ocasiones, también la comida del día siguiente tiene que convertirse en algo rápido y práctico para evitar que les den las mil. Y muchos, ante el cansancio que arrastran y las ganas de pasar un rato relajante en familia, cogen el camino de la comida rápida e insalubre sin saber que en el mismo tiempo y con idéntico trabajo (es decir, poco) pueden preparar platos ricos y saludables.

En mayo hará ocho años que escribo para En Mil Batallas y si algo he comprobado durante este tiempo es que a todos nos gusta comer bien y nos hace sentir aún mejor alimentar a los nuestros de forma sabrosa y saludable; sin embargo, no siempre podemos hacerlo. Por eso, en mi blog creé un apartado específico de platos que se pueden hacer en 5 minutos (o menos) de principio a fin y, desde entonces, he publicado otras muchas recetas que no llevan más de ese tiempo de trabajo (luego son el horno o la olla los que siguen trabajando para nosotros). No es complicado, en esos cinco minutos no hace falta correr en plan Superman o Superwoman ni tampoco es necesario aprender a picar cebolla a toda velocidad con los ojos cerrados: es todo mucho más sencillo y tranquilo. Porque seguro que después de un día agotador y estresante te sientes mejor pasando un rato con los tuyos (o contigo mismo/a, relajadamente) sabiendo que, además, les/te estás proporcionando alimentos saludables, frescos y sabrosos.

¡Aquí van algunas pistas para que logres preparar platos deliciosos y saludables en unos pocos minutos!

Lo primero que necesitas es una despensa y un congelador llenos de productos sanos y fáciles de cocinar. Tenlo en cuenta cuando hagas la lista de la compra pues no solo comerás de forma más saludable y apetecible sino que, además, gastarás menos dinero. ¿Sabes que se tarda más en freír unas patatas precocinadas en una freidora eléctrica que en saltear unas verduras congeladas en un wok o que cocinarlas en una vaporera eléctrica? Pues sí, y son guarniciones mucho más ligeras y sanas, que además permiten variar sabores porque puedes ir cambiando de vegetalees los distintos días de la semana. ¿Te has parado a pensar que se tarda lo mismo en poner unos filetes de pescado congelado en el horno que una pizza precocinada? Aunque les añadas unas hierbas o especias y unas ruedas de limón, lima o naranja, no mancharás más y comerás mucho mejor. ¿Habías pensado que manchas mucho más (y no es tan sano) si fríes unas alitas o unos nuggets de pollo que si asas unas alitas o unas pechugas de pollo especiadas?

Hay muchos platos ricos y sanos que puedes preparar con el mínimo tiempo, trabajo y esfuerzo. Te doy 5 ideas para poner un plato saludable en la mesa en 5 minutos:

• Una ensalada que se prepara poniendo en una ensaladera el contenido de 1 bolsa de canónigos, 1 puñado de nueces peladas y unas virutas de jamón curado. Puedes enriquecerlo con unos dados de queso fresco descremado o con una lata de pollo en aceite de oliva.

• Una crema fría que se prepara pasando por la batidora el contenido de 1 bote grande de espárragos blancos con 1/2 vaso de leche (o bebida de arroz) con un toque de pimienta negra y 1 pellizco de sal. Puedes enriquecerlo con cebollino picado.

• Unas rebanadas de pan de semillas cubiertas con lonchas finas de pechuga de pavo braseada, lonchas finas de tofu y germinados varios (puedes comprarlos refrigerados si no tienes tiempo de germinarlos tú en casa).

• Un delicioso postre que se hace mezclando 3 yogures descremados con 1 bandeja de frambuesas frescas limpias, 2 cucharadas de copos de avena finos y 10 gramos (un cuadrado u onza) de chocolate negro picado a cuchillo o rallado. Se sirve en copas o cuencos.

• Un sabroso plato de mejillones que se hace poniendo en una fuente el contenido (sin su líquido) de 1 bolsa de mejillones pasteurizados y cubriéndolos con una tarrina de tomates cherry, 1 bote de puntas de espárragos blancos, albahaca fresca o congelada y unos hilos de aceite de oliva virgen extra.

Preparar platos de apariencia más elaborada también es posible con 5 minutos de trabajo, luego solo necesitarás que el horno trabaje un rato más por ti mientras tú descansas, te duchas, te sientas un rato en el sofá en familia o lo que te parezca mejor. Como muestra, te dejo otras 5 ideas:

• Enciende el horno a 200ºC. Pon en una fuente 1 kilo de jamoncitos de pollo, 2 manzanas lavadas y cortadas en cuartos, sal, 1 cucharadita de semillas de mostaza y unos hilos de aceite de oliva virgen extra. Después de 45 minutos horneando, sácalo a la mesa y añade 1 puñado de almendras o nueces antes de servirlo.

• Enciende el horno a 180ºC. Pon 4 filetes de merluza u otro pescado blanco congelado en la fuente, sobre unas ruedas no muy finas de lima y naranja, aliña con unos hilitos de salsa de soja y de aceite de sésamo y hornea unos 25 minutos. Sírvelo tal cual o con cebollino picado por encima.

• Enciende el horno a 250ºC. Pon en una fuente 8 patorras de pavo, 3 peras limpias cortadas en cuartos y 1 cebolla pequeña pelada y cortada en ruedas no muy finas. Salpimienta y deja que se hornee unos 40-45 minutos. Sírvelo recién hecho.

• Enciende el horno a 225ºC. Pon en una cazuela que pueda ir al horno el contenido de 1 bote de alubias blancas, 4 codornices de las que venden limpias, 1 tomate troceado (o unas cucharadas de tomate triturado), tomillo y orégano secos, sal, pimienta, 1 vaso de caldo vegetal (puede ser de brick), 1 cabeza de ajos entera y sin pelar y 1 hoja de laurel. Cocina en el horno durante 30 minutos y sírvelo al momento.

• Enciende el horno a 200ºC. Pon en una fuente 4 cuartos traseros de pollo, 8 ciruelas secas deshuesadas, 1 vaso de zumo de manzana y 1/2 ramita de canela. Hornea unos 40-50 minutos y sírvelo.

¿Qué te parece, lo ves factible para tu día a día? Seguro que leyéndolo ya se te han ocurrido algunas ideas nuevas variando estas recetas con aquellos ingredientes que son más de tu gusto… Anímate a cambiar de hábitos, no dejes que la falta de tiempo te agobie o te haga malcomer.

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