Nos gusta lo nuevo y estrenar, pero lo antiguo también puede ser una preciosidad y cuando el presupuesto no alcanza, con un poco de ingenio y buen gusto, podemos conseguir un gran resultado.
Esa delgada línea entre algo vintage, viejo, antiguo e inservible en decoración a veces depende de los ojos de quien lo mira. Todo se puede arreglar y reformar y tener una nueva vida (o casi todo ;) ).
Esta cocina antigua sueca en color celeste no puede esconder sus años, tiene desconchones, capas de pintura, la forma y el diseño ya no son los que se demandan ahora, los electrodomésticos no son el último modelo, el suelo de tablones de madera ya están muy desgastados, pero todo está limpio y bien coordinado, con textiles, una buena iluminación, plantas frescas y una mesa con sillas nuevas, lo que hace el conjunto muy muy agradable.
La falta de presupuesto para la reforma, se suple con limpieza y buen gusto para los detalles y hacer un espacio agradable.
Imaginad si quitáramos plantas, accesorios o textiles, lo feilla que sería la cocina, está claro que los detalles hacen la diferencia. En un futuro, cuando el presupuesto lo permita, seguro que cambiarán todo a una versión moderna y eficiente, pero para una temporada, la cocina está muy bien resuelta.
El resto del pequeño apartamento lo ocupa el salón dormitorio, una zona íntima y privada igual de acogedora y bien decorada como la cocina, donde se repite ese azul celeste en la pared, los textiles cálidos y los detalles en madera. A ver qué os parece el conjunto ¡feliz miércoles!
Vía: Kvarteret mäkleri
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