Hola, buenas tardes, mis queridos, queridas, amigos, amigas, amigotes, amigotas, buenas gentes (y malas, quién soy yo para decidir quien lee mis tontunas), desocupados lectores (aviso, la frase es del Quijote, no es que os diga en qué tenéis que ocuparos). Hoy os voy a dar la turra (la lata, la brasa, la "turra" es muy bilbaíno) hablándoos de un magnífico libro de Marta Torres Molina: "Cocineras en Ibiza". Marta, también conocida como "Dorothy con tacones" por su blog, del que soy seguidor desde hace tiempo, ha escrito un libro precioso, que os recomiendo. El libro cuenta la vida de diez cocineras ibicencas e incluye un montón de recetas de cada una de ellas. Naturalmente, vuestro amado bloguero (yo mismo) ha querido ensayar alguna de las recetas. Este es el relato de mi intento, queridos seguidores/seguidoras (que no, que no me pilláis).
Estuve en Ibiza hace ya miles de años, ya ni me acuerdo cuantos. Debe hacer tantos, que esta buena ibicenca que aparece en la foto se ha vuelto de piedra. como la mujer de Lot. El sujeto que aparece a su lado y que tiene la barba y el pelo negros (y no grises, pardiez), me recuerda a alguien, en fin, no sé.
Pero volvamos al libro de Marta, Sorokin, que te enrollas más que una persiana andaluza. Todas las protagonistas, tal como lo cuenta el libro, son mujeres firmes y decididas, que se han hecho a los fogones a base de currar. A mí, la que más me ha impresionado es Lolita Costa Planes, nacida en 1920 (casi nada) y que ha recibido en su restaurante desde Freddy Mercury hasta Mario Conde. Pero, en fin, por ensayar un plato, he elegido las lentejas viudas de Pepa Planells:
Pepa Planells. La foto, por supuesto es del libro
He elegido las lentejas, porque A) adoro las lentejas. B) es una receta facilita para empezar (Haré otras, os lo prometo)
Los ingredientes son: Lentejas precocidas, alcachofas, una cebolla, una zanahoria, un ajo, un tomate, unas judías verdes, una patata, una ñora... (¿una ñora?, ¿de dónde vas a sacar una ñora, Sorokin?. Os lo explicaré más adelante, no se me arremolinen, como decía Cantinflas)
Así es que me tuve que ir a Chez Galip, mi suministrador turco de frutas y verduras, del que ya os hablé aquí, pinchad, pinchad buenas gentes:
Y me senté en la terraza a cortar las verduras:
Tenía, naturalmente, a mi lado una copa de Champagne Vranken, para ayudarme en mis sobrehumanos esfuerzos.
Lo más difícil fue pelar las alcachofas, pero debo deciros, queridos míos, que son ellas las que crean la diferencia. Dan un sabor único.
Bueno, pues con un poco de aceite de oliva, primero pocho la cebolla en trozos grandes, un ajo machacado y... la "pseudo ñora". Os explico, son unos pimientos choriceros que compré en el mercado de Alicante en 2017 durante una excursión de blogueros a Tabarca. Pinchad si ello no despierta un recuerdo vivo en vuestros corazones:
La pseudo ñora:
Vale, cuando todo está pochado se ralla el tomate:
Y se le añaden unas hebras de azafrán
Por supuesto, luego se añade agua y se pone a hervir. El libro habla de 30 minutos, pero yo lo tuve más tiempo, hasta que constaté que todo estaba hecho
Y luego procedí a hacerlo desaparecer en mi estómago. Debo decir que el libro habla de añadir unos cuartos de cebolla cruda como acompañamiento, Yo pasé de ese consejo, pero seguí otro que consiste en añadir un punto de sobrasada, aprovechando que había traído de España tan sabroso ingrediente. Pero claro, ya no son "viudas", son lentejas con compañía.
Tal vez os parezcan muy caldosas, pero así es como le gustan a vuestro amado bloguero. Entre tanto, os prometo que haré otra receta.
PS: Gracias a Marta por enviarme el libro. ¡Dorothy, vuelve a tu blog, tus seguidores te echamos de menos!
Besotes grandes y variados