El otro día fuimos al Parque Warner con Ana para su cumple. No estaba mal en el sentido que no había mucha gente. Y como decía mi marido, “por lo menos no está lloviendo”. Qué más quisiera. Tanto tiempo bajo el sol me atonta completamente, no lo soporto (¿la piel muy blanca, puede ser?). No sé, pero jamás había apreciado más un cóctel como esa noche al llegar a casa, que se llamaba, de forma muy apropriada, “Golpe de sol”.
La relativamente poca cantidad de zumo de pomelo en relación al vodka hace que no sea tan ácido ni tan dulce como otros cócteles con zumo – en este caso, el zumo sirve para “cortar” el sabor del vodka, no taparlo. El resultado es una mezcla afrutado y ligeramente amargo que, por lo menos en mi caso, devolvió mis neuronas a su sitio.
Para cada copa necesitas:
40ml de vodka
10m de Cointreau
20ml de zumo de pomelo
Hielo
Pon todos los ingredientes en la coctelera, y agita. Vierte la mezcla, sin el hielo, en una copa tipo martini. ¡Disfruta!
Para acompañar su preparación, sobre todo si has tenido un día como yo con demasiado sol, mucho ruido y niños incansables, recomiendo algo muy relajante, como “In the Waiting Line”, de Zero 7. Además, su título describe como pasamos gran parte del día. Perfecto.