El pasado 1 de julio, "Extremadura: caminos de cultura" tuvo de nuevo el honor de poder colaborar con Libre Producciones a la hora de elaborar un episodio más de su serie "El lince con botas 3.0". En esta ocasión, dirigiéndonos junto a la rivera del arroyo Friegamuñoz, entre los términos municipales de Alconchel y Villanueva del Fresno, visitamos las ruinas del conocido como convento de Moncarche, o de Nuestra Señora de la Luz.
Este próximo viernes, día 7 de octubre, tendrá lugar el estreno del capítulo resultante. Retransmitido a través de Canal Extremadura TV, la emisión dará comienzo a las 23.20 horas. Desde "Extremadura: caminos de cultura", siempre sin dejar de dar las gracias a Libre Producciones por su apuesta por este blog, queremos invitaros a su visualización, deseando que os guste, pero sobre todo que sirva para daros a conocer no sólo un monumento único en nuestra región, sino también el contexto histórico que le rodea y que, en su momento, sirvió para tejer la crónica de nuestra tierra, y, por tanto, de nosotros mismos.
"El siglo XVI, puerta de la Edad Moderna, claridad frente a la oscuridad de la Edad Media. Simplificación a todas luces que cuesta entender, y más en estas tierras de aquel tiempo, cuando se persiguen y expulsan judíos y moriscos, se bautizan los imperios coloniales y triunfa el comercio de esclavos. Se consolida la religión católica como esqueleto del reino. El papado ambiciona un poder terrenal que provoca la crisis de la Iglesia, la Reforma protestante y la división de la cristiandad. Mientras tanto, en las sierras más inhóspitas se levantan conventos de la Orden franciscana. Frailes mendicantes, austeros y solitarios, en el marco de la Iglesia católica y según el ideario de san Francisco de Asís. Hermandad cuya trayectoria está marcada por sus continuas renovaciones y conflictos en el intento de aproximarse al ideal evangélico dictado por su fundador. Y llegamos a la accidentada rivera del Friegamuñoz, río de aguas temporales sometido a la fiereza del estío, donde un convento montaraz aguarda aún el trance final mientras pueden leerse en sus ruinas algunos de los acontecimientos más trascendentes relacionados con la religiosidad entre los siglos XVI y XIX..."