Nos encontramos ante una sociedad fallida, la falta y precarización del trabajo empeoran y empeorarán todavía más las condiciones de vida del ciudadano de a pie, si ha esto le añadimos la crisis ecológica, la contaminación y la deshumanización en general de la sociedad, el futuro de la misma peligra. Cuando los Estados empiecen a invertir más en seguridad (ejército y policía) que en otros terrenos sociales se comenzarán a prever conflictos y estallidos de mayor o menor intensidad. Los Estados policíacos empezarán a implementar estados de excepción de forma directa e indirecta para garantizar un orden autoritario basado en la represión y la violencia. Los derechos irán menguando a medida que el Estado se fortalezca. Lo que llaman el Nuevo Orden Mundial o mundialización no es mas que una dictadura global que está a la vuelta de la esquina.
El Sistema nos dice que poseyendo un un buen coche seremos felices, nada más alejado de la realidad, este simulacro al que estamos sometidos permanentemente por la propaganda nos conduce a un estado de culpabilización del que no podemos salir, el mercado siempre nos ofrecerá coches más caros que nunca podremos tener. La felicidad siempre será efímera en el Capitalismo porque su dinámica y funcionamiento residen en la acumulación sin fin, no parece haber límites (salvo los que impone la Naturaleza) para éste. No contempla otro escenario que no sea el control y el Poder que utiliza como amenaza contra el caos y desorden que provocaría el hombre medio sin un Gobierno al que este sometido.