La política turística de la Sra. Colau es nefasta, nefasta para Cataluña, quiero decir, y conduce a una pérdida significativa de ingresos en pequeñas y familiares empresas que viven de los incontables visitantes que se dan cita en la Ciudad Condal, o al menos, se daban en el pasado. Numerosos cruceros trasladaron su sede a valencia; la cadena estadounidense CNN aconseja no visitar Barcelona y recurrir a Valencia también, como alternativa perfectamente razonable. La pintada en la imagen que ilustra nuestra entrada de hoy, pone tilde al patetismo de independentistas con pulsiones más que ideología razonada y razonable. No rotulan en español por aversión a la lengua de todos los ciudadanos de este país; tampoco en catalán, porque podria resultar incomprensible a quien lo leyese allende Granollers, y terminan por utilizar una lengua extranjera para proponer una mentira. Glorioso.